Gaby Salido
2 meses después de comenzar el periodo ordinario de sesiones en el Congreso de la CDMX, y de haber recibido el 4º informe de Claudia Sheinbaum, ha llegado el momento de escuchar el estado en que se encuentra cada una de las áreas de su gobierno.
Ante el inminente ejercicio de rendición de cuentas que la administración pública debe realizar de cara a la ciudadanía, se necesita hacer un corte de caja en las materias importantes para los capitalinos, por lo que es necesario recibir a los titulares de cada Secretaría en comparecencias.
Mucho añoramos el formato presencial de estas comparecencias en comisiones, pues permite que fluyan preguntas y respuestas; dando posibilidad de dialogo abierto y plural.
Sin embargo, el Grupo Parlamentario de Morena, ha abusado de su mayoría para menguar estos ejercicios de rendición de cuentas a una simple reunión de trámite, solo para cumplir el requisito; pidiendo pactos de civilidad, en donde los servidores públicos están de forma virtual.
A pesar de continuar con este formato que comenzó a causa de la pandemia, la ciudadanía reclama resultados positivos, y que se demuestre que no están reportando el ocaso de una administración; pues a 4 años de gobierno, hay grandes pendientes por cumplir y cosas por reportar.
Por más que se nos esforcemos en buscar datos que beneficien a la ciudad, en los informes que presentan, encontramos recortes presupuestales peligrosos, que ponen en riesgo la operación cotidiana importante, incluso para la prestación de servicios sociales.
Donde no hay recortes presupuestales, hay intentos por aplicar verdaderas políticas de gobierno, pero queda en las buenas intenciones; solo por mencionar unos ejemplos podemos hablar de movilidad, medio ambiente o desarrollo urbano, donde hay grandes pendientes por atender:
La falta de una verdadera política de movilidad en beneficio de la ciudad, ha puesto en riesgo la integridad y la vida de ciclistas, peatones, usuarios del transporte público y los propios automovilistas, pues no hemos visto acciones certeras que permita reducir el número de accidentes y de personas fallecidas o lesionadas.
No vemos acciones claras en materia de medio ambiente para recargar los mantos acuíferos y pozos de agua en la capital, en vez de acciones para seguir importando agua de la megalópolis; o hablando de huella ecológica, no vemos acciones para disminuir el impacto negativo que las actividades urbanas tienen en nuestro entorno; por el contrario, sin que haya un informe del impacto real de las fuentes contaminantes en la capital, en el Congreso se analiza una propuesta de la jefa de gobierno para quitar como requisito para establecimientos mercantiles, las licencias medio ambientales y sustituirlas por avisos, argumentando simplificación administrativa.
Del desarrollo urbano, esperamos ver cosas verdaderamente favorables y un reporte de resultados de las facilidades administrativas; y no una oda a programas de vivienda para supuestamente ser fuentes de empleo.
Es por esas interrogantes que preferimos comparecencias presenciales, para evitar que los servidores públicos eludan respuestas; pues la ciudadanía espera más que un acartonado y superado formato de Informe, en el que sólo se repiten cifras para hacer parecer que todo va bien.
Las y los ciudadanos esperan cifras realistas, no los datos generales que hace un mes anunció la Jefa de Gobierno; queremos que se reporten acciones contundentes y en beneficio de la ciudadanía, no buenas intenciones.
Por eso, cada una de estas 19 comparecencias, constituye una oportunidad para demostrar que la prioridad de este gobierno es la gente; y no que solo trabajan para fortalecer el objetivo presidencial de quien hoy dirige la administración de la Ciudad de México.
