RIO DE JANEIRO/BUENOS AIRES (Reuters).- Durante gran parte de 2020 y principios de 2021, América del Sur fue el epicentro de la lucha global contra COVID-19. El oxígeno se agotaba en Perú. Los sepultureros trabajaban toda la noche en San Pablo, Brasil. Los cuerpos se guardaban en contenedores en Guayaquil, Ecuador. Brasil, el país más