Aida Ramírez / Ovaciones
Foto: Cortesía Santander México
El sector agropecuario exportador tiene el potencial y condiciones para beneficiarse por el nearshoring al aprovechar su fortaleza en el Segmento Agro, aseguró Santander México al presentar su Nearshoring Data Monitor del primer trimestre de este año.
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“Estados Unidos es el mayor productor agrícola del mundo, pero sus importaciones ya han superado a sus exportaciones; la oportunidad se origina por la fortaleza de México en el comercio del agro con la Unión Americana, así como por la disponibilidad de territorio y los competitivos costos de mano de obra y de transporte, que hacen atractivo a las empresas multinacionales invertir en nuestro país, sea directamente o vía asociaciones con productores mexicanos establecidos, para exportar su producción a la Unión Americana”.
Así lo explicó Rodolfo Hernández Sada, director Ejecutivo de Negocio Internacional y Agronegocios Santander México quien en ese contexto, adelantó que el Grupo financiero estará destinando tres mil millones de pesos en lo que resta del año, para apoyar al segmento de las pequeñas y medianas empresas, tanto en su actividad agro como en exportaciones.
Según el estudio del banco de origen español, mientras el vecino país del norte está incrementando sus importaciones de productos agropecuarios, México es ya el tercer proveedor de estos productos hacia el mercado estadounidense, con un 31% del total, lo que equivale a 44.2 mil millones de dólares al año, generando un monto de divisas que solo es superado por las remesas.
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Destacó que básicamente son productos relativos a hortalizas, frutas, vegetales y bebidas alcohólicas, esto es, berries, papa, aguacate, tomate, pimiento, carne de bovino, panadería, tequila y cerveza.
Señaló que en México, el Agro representa el 3.4% del PIB y contrata al 11.8% de la población económicamente activa, por lo que “conectar a este sector con el nearshoring impactaría en los niveles y calidad del empleo, contrarrestando la migración hacia Estados Unidos, y generaría riqueza para los estados del centro, sur y sureste de México, entre otros beneficios”.
Rodolfo Hernández aseveró que si bien México es un gran exportador de bienes agrícolas hacia los Estados Unidos, también es un importador muy importante; ya que somos el segundo país, después de China, en términos de compra de bienes agrícolas, con una cifra de 28.9 miles de millones de dólares, en 2022.
“Por lo que consideramos en el Banco que es una oportunidad, esta fortaleza comercial de ser el segundo proveedor y el segundo comprador de Estados Unidos. Nos da una ventaja competitiva importante, sumada a la disponibilidad de territorio que tenemos a nivel nacional, y lo que es competitivo de nuestros costos, esto es, de mano de obra y de transporte”, lo que permite que otras empresas puedan invertir o se instalen en el país para venderle a Estados Unidos, o que se asocien con productores locales para el mismo fin.
Observó que este sector podría beneficiar en la generación de riqueza en estados del centro, sur y sureste del país, ya que tienen buena cantidad de territorio y gran cantidad de agua”.
De hecho, consideró que ante los problemas que se están afrontando en el campo por la sequía originada por el cambio climático, el territorio nacional estaría más que listo para adoptar sistemas de riego por goteo, o sistemas de agricultura protegida, la aplicación de fertilizantes naturales que no contaminan ni empobrecen a la tierra.
“Todo eso podría venir asociado con la inversión de estas empresas que se instalen en México, y que podrían darnos esta tecnología. Pero pensemos también en la comunidad menonita en el estado de Chihuahua, lo que ha logrado básicamente con tecnologías sofisticadas, digámoslo así, de riego y de hortaliza protegida.
