Pilar Mansilla / Ovaciones
Fotos: Aracely Martínez

A seis años y medio de que sus viviendas fueron afectadas por los sismos de 2017, los habitantes del edificio Pedro Antonio de los Santos 50, en la alcaldía Miguel Hidalgo, viven en la incertidumbre, ya que no saben cuándo podrán regresar nuevamente a sus hogares.

Inmersos en un cambio de administración entre Miguel Ángel Mancera y Claudia Sheinbaum Pardo para relevarle en el cargo, después de que ella ganó la elección en el 2018 como jefa de Gobierno, se vieron envueltos también en una auditoría que ordenó a su llegada al Fondo de Reconstrucción, lo que obligó a detener las obras.

Los vecinos, como Anabela Escárcega Herrera y Daniel Parra, quienes siempre han vivido en ese predio, al advertir que nunca se dieron a conocer los resultados de la auditoría, coincidieron en señalar que la medida de la ahora candidata presidencial por la coalición “Sigamos haciendo historia” provocó que la obra, además de que se retrasó, hay un sobrecosto, ya que se tenía un presupuesto designado, pero al haber detenido la obra, la inflación no respetó los precios que las constructoras habían acordado, ya que el material se encareció.

A decir de los vecinos, la administración local, primero con Claudia Sheinbaum, cuando el ahora senador por Morena y vocero de la candidata a la jefatura de Gobierno, Clara Brugada, fungía como comisionado para la Reconstrucción de la Ciudad de México, y posteriormente con Martí Batres Guadarrama al frente del gobierno local y Jabnely Maldonado Meza como la nueva titular de la Comisión, los han hecho firmar tres convenios modificatorios para realizar la obra y la entrega de esta.

El viernes 3 de mayo, Batres Guadarrama acudió al predio a hacer la verificación de obra, la cual aseguraba se encontraba con un avance del 94 por ciento, sin embargo, la obra, a decir de los vecinos muchos de ellos molestos, era el avance de “obra gris”, lo que les daba a entender que por segunda ocasión no les sería entregada en la fecha prometida. La promesa era que tendrían las llaves de su casa el 10 de mayo, cosa que no ocurrirá porque a decir de los propios trabajadores de la Comisión de Reconstrucción, esto podrá ser hasta finales de junio.

¿Qué es lo que se construye?

Con un costo de obra de reconstrucción de casi 120 millones de pesos, con un total de nueve mil 702 metros cuadrados construidos, con capacidad para 58 cajones de estacionamiento, además de los 38 departamentos de “reposición” se construyeron 16 más de redensificación.

Las nuevas viviendas pertenecen al Gobierno de la Ciudad de México, por lo que tienen el derecho de venderlos con el objetivo de “recuperar” un monto del dinero invertido de la obra.

Y, aunque la redensificación debe ser informada a la alcaldía, que en este caso es la Miguel Hidalgo, no fue así, por lo que a decir de las autoridades de la demarcación, esta situación ha provocado diferendos y diversas irregularidades, ya que los permisos originales de la obra, antes de que fuera afectada por los sismos está autorizado para determinado número de departamentos y pisos, lo que podría generar, al momento de que ellos acudan a realizar las verificaciones de la obra, estas serían clausuradas por no cumplir con los permisos que está obligado el gobierno de la Ciudad a emitirlos y notificar a las autoridades de la alcaldía.

En la construcción de la nueva edificación sí respetó el tamaño de los departamentos de reposición, sin embargo, si alguno estaba interesado en uno de redensificación, podría adquirirlo, siempre y cuando pagara un precio extra.

Anabela Escárcega Herrera decidió esta opción después de que unas vecinas no aceptaron la ubicación que les habían asignado, por lo que acordaron un cambio.
Anabela, junto con su mamá y su hijo, que también es arquitecto, alcanzaron un acuerdo con la Comisión de Reconstrucción cuando Cravioto era el comisionado y Jabnely Maldonado Meza, en ese momento fungía como directora General de Atención a Personas Damnificadas.

En el acuerdo, se estableció que tendrían juntarían los dos departamentos, por lo que demolerían la pared de división, así lo hizo la constructora y ahora, Anabela Escárcega denuncia que Jabnely Maldonado, que aceptó y firmó el convenio cuando fungió como directora, ahora como titular de la Comisión ya desconoció el acuerdo.

A decir de los afectados, el Gobierno capitalino determinó “despojarla de su propiedad” para poner en venta ese departamento. El viernes, Martí Batres Guadarrama al escuchar su denuncia, tratando de no detener su paso rumbo al templete, se comprometió a revisar el caso.

¿Cómo van a entregar los departamentos?

Daniel Parra, quien advierte que ante tantas modificaciones y el gobierno local tiene el derecho hacer la venta los departamentos que se construyeron de más, no quiere pensar que están haciendo su “cártel inmobiliario”, sin embargo, tampoco descarta la posibilidad, ya que cree que los van a querer vender a sobreprecio.

“Antes del temblor eran cuatro pisos, ahora es un sótano, una planta baja y siete pisos más, son dos alas. Hemos tenido tres convenios modificatorios de tiempo de entrega”.

Ante la situación y en busca de mejorar su calidad de vida antes del sismo e intentar salir de la vivienda donde residen, en San Pedro de los Pinos, donde pagan una renta desde que tuvieron que dejar su casa, no tienen muchas opciones y es que, no podrán vender el departamento hasta después de cinco años de que les fue entregado, además, tampoco saben cuándo les serán entregadas las escrituras.