Afecta fenómeno de El Niño ya a la pesquería en México, por baja de nutrientes

3, marzo 2024

Patricia Ramírez / Ovaciones
Foto: Cortesía UNAM

La misión multidisciplinaria de especialistas de la UNAM que se encuentra a bordo del buque oceanográfico El Puma, determinó que debido al fenómeno El Niño -Oscilación del Sur (ENSO, por sus siglas en inglés) que se desarrolla actualmente en México se ha incremento el agua cálida a la entrada del Golfo de California, ha disminuido el fitoplancton y nutrientes, y se registra mayor salinidad.

Las primeras observaciones realizadas indican que estás condiciones impactan directamente en las pesquerías, toda vez que la menor presencia de nutrientes en el agua y el aumento de la temperatura pueden afectar a la industria atunera y a otros organismos marinos, además de los arrecifes de coral.

En entrevista, María Adela Monreal Gómez y Martín Merino Ibarra, investigadores del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL), así como Ligia Pérez Cruz y Miguel Ángel Díaz Flores, del Instituto de Geofísica (IGF), subrayaron que está es la primera ocasión en la que se realiza una investigación que vincula a especialistas de geofísica, ciencias del mar y fisicoquímica para revisar in situ sus efectos en aguas mexicanas, por lo que el equipo revisó factores como temperatura, salinidad, oxígeno disuelto, nutrientes, clorofila, además de colectar materiales para metagenómica.

Monreal Gómez detalló: lo que más fácilmente se sabe es la elevación en la temperatura del mar por las revisiones satelitales disponibles, pero es importante ver las diferencias a lo largo de la columna de agua, pues se han observado cambios hasta a 500 metros de profundidad.

Esto representa hasta dos grados Celsius más, pero hallamos a 50 metros de profundidad una gran anomalía de hasta cinco grados de diferencia. En la superficie se sabe rápidamente qué ocurre, pero no en lo profundo, por eso la UNAM ha realizado un gran esfuerzo para estudiar esta fase cálida de la interacción océano-atmósfera, puntualizó la oceanóloga.

En junio de 2023, agregó, se comenzó a registrar el aumento de la temperatura superficial del mar, que hasta ahora es considerado uno de los tres más significativos, por lo que decidió visitar el Pacífico mexicano (Jalisco, Sinaloa y Colima) y la entrada del Golfo de California (Baja California Sur).

Las primeras gráficas de las mediciones elaboradas en la campaña, que se efectuó en la segunda quincena de enero, evidencian que en la parte sur del Golfo se muestra elevación de la temperatura superficial, donde aún llega agua cálida del verano.

A esto se suma que, según los registros, diciembre suele ser el mes en el que alcanza el máximo de temperatura por el fenómeno; sin embargo, las mediciones en la campaña indican que aún continúa mostrándose el efecto de “El Niño”.

Se trata de una corriente cálida que se manifiesta porque los vientos alisios se debilitan y en ese momento la corriente cambia de dirección y favorece las lluvias en América, porque la mayor temperatura se va hacia la costa; pero los nutrientes que son muy importantes para el desarrollo del fitoplancton se abaten.

“El océano tiene una capa de concentración máxima de nutrientes y cuando hay Niño se hunde, entonces los organismos no pueden acceder a ellos para desarrollar la cadena trófica (fitoplancton, zooplancton y luego todos niveles que le siguen)”. Si tuviéramos más herramientas para predecirlo y una concientización adecuada, permitiría que las autoridades puedan tomar mejores decisiones, aclaró.

A esto se suma otro fenómeno oceánico que se llama surgencia, es decir, nutrientes oceánicos viajan de capas subsuperficiales a la superficie, y ante la presencia de El Niño los vientos no ayudan a que se dé. Entonces no hay mucha producción biológica, lo que afecta a las industrias pesqueras, por ejemplo, pues los bancos de atún se mueven.

La importancia de que el “El Puma” y los investigadores hayan estado ahí en este momento que se desarrolla en las costas mexicanas, es para dar información sobre cómo evoluciona y cómo daña a la biosfera, es decir, los cambios físicos cómo repercuten en las comunidades planctónicas y, en particular, al fitoplancton (algas microscópicas) lo que tiene implicaciones para las pesquerías, precisó la también coordinadora de Plataformas Oceanográficas de la UNAM.

En el caso particular del Golfo de California es uno de los más productivos en el mundo y hay importantes pesquerías, por lo que se trata de ver qué pasó con las especies.
Las muestras que se tomaron de la columna de agua llegaron hasta los 1500 metros de profundidad, y además se revisó la velocidad y dirección de las corrientes en la costera y en la zona más profunda; por ejemplo, en el Golfo de California se llegó a los 3 mil metros.

Actualmente los datos son procesados, pero las primeras observaciones indican disminución en las comunidades plactónicas, y los datos físicos preliminares añaden que hubo mayor incursión de aguas tropicales hacia dentro del Golfo de California.