Alexa Moreno da un respiro profundo y toma impulso con un pequeño salto para emprender el sprint que la lleva hacia el potro donde apenas y se apoya para ejecutar un estético salto mortal, ese que los franceses llamarán ‘saut périlleux’ durante los próximos Juegos Olímpicos de París 2024. La mexicana rota alrededor del eje transversal y añade dos piruetas para aterrizar sobre el piso con una excelsa firmeza. La imagen se repite una y otra vez, y así será hasta alcanzar esa perfección con la que espera competir por una medalla con extractos de la Torre Eiffel el próximo verano.

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Nacida en Mexicali, Baja California, Moreno es una rockstar del deporte mexicano. Una esperanza natural de medalla gracias a una carrera que resume perfectamente la idiosincrasia nacional. Su inquebrantable espíritu la hizo no claudicar, ni siquiera cuando fue víctima de un bullying colectivo cuando se dio a conocer mundialmente en la justa veraniega de Río 2016. Y salió adelante. Tomó toda esa negatividad y la transformó en combustible para seguir adelante.

“He tenido bastantes experiencias, yo creo que en eso es en lo que más me voy a apoyar, en la experiencia que tengo y si es una gran manera para afrontar los momentos de competencia, por eso tengo fe”, responde Moreno a la prensa sobre cómo afrontará su tercera participación olímpica, en la que llegará como una de las candidatas a una medalla entre la Delegación Mexicana.

Alexa finalizó dentro del top 15 en aquella prueba de salto de Río 2016 que la marcó para siempre. Ya para Tokio 2020, con su carácter curtido tras los múltiples golpes de la vida, la sudcaliforniana acarició el podio al culminar en el cuarto lugar. Inminentemente, el país entero estará pendiente de ese último salto de calidad para cerrar en el podio del Olimpo una brutal carrera.

“Al final de cuentas, somos la cara del deporte del país y claro que queremos dar lo mejor. Nadie va a pasearse, estoy segura de que todos tienen sus propios objetivos y metas y tampoco hay que perder vista que hemos trabajado por esto por mucho tiempo y es algo para nosotros también, algo que hay que disfrutar”, asegura Alexa entre sonrisas y un cabello matizado de morado, porque para ser rockstar, hay que parecerlo.

La gimnasta de 29 años no quedó satisfecha luego de que en los Centroamericanos de San Salvador 2023 cosechara tres medallas de oro, una de plata y una de bronce, por lo que de inmediato tomó cartas en el asunto y se atrincheró en el World Champions Centre de Texas, conocido lugar de entrenamiento de la multimedallista olímpica Simone Biles, quien junto a su equipo multidisciplinario, asesoraron a la cachanilla.

Y es que después de su participación en 2021 en los Juegos celebrados en tierras niponas, Alexa Citlali Moreno Medina meditó un posible retiro mientras se recuperaba de algunas lesiones. Pero una vez que decidió continuar en la gimnasia artística, volvió a tomar vuelo, arropada por la mejor gimnasta del mundo.

“No, no creo que alguien se encuentre al 100% físicamente y tampoco antes días antes. Yo creo que lo mejor es estar de la mejor manera al momento, así es normal, es deporte de alto rendimiento. Solo estoy tratando de llegar de la mejor manera posible. La verdad es que no ha sido fácil, he tenido bastantes barreras por ahí, obstáculos que se presentan, como normalmente en la vida de un deportista, pero hay que afrontarlo y seguir adelante. Me estoy preparando, ese es el camino, es trabajar mucho y seguir entrenando”, comparte.

Alexa ha sido inspiración incluso para la comercialización de una muñeca de la marca Barbie. Su inspiradora historia es contada una y otra vez mientras más marcas se suman para vincular su nombre con el de la bajacaliforniana. Y no es pa amenos, pues se trata de una siete veces medallista en Copas del Mundo de la Federación Internacional de Gimnasia (FIG) y ganadora del Premio Nacional de Deportes en 2019.

Será en el Bercy Arena de París donde la mexicana se presentará ante el mundo una vez más en busca de su ascensión al Olimpo, ahí donde buscará escribir su nombre con letras del oro adonde ninguna mexicana lo ha escrito antes.

“Es una nueva experiencia, yo creo que todos los Juegos Olímpicos son diferentes, no sé qué esperar en realidad, yo solo quiero pensar en pasarla bien. Es lo más importante, al final hacemos el deporte que nos gusta. Cada quien a su modo ha ido creciendo y desarrollándose en su deporte y al final es nuestra fiesta, con esto cerramos el ciclo, eso es muy importante, no ser consumido por otros factores, así puedes dar lo mejor”, finaliza.