El América se encuentra estancado en una inusual crisis que luce aún más alarmante si se compara con los dos torneos casi perfectos que le anteceden. Mientras André Jardine se nota desesperado, víctima de los malos resultados en el inicio del torneo Apertura 2024 de la Liga MX, la búsqueda de explicaciones lleva inevitablemente al nombre de un ídolo reciente que abandonó el nido en busca de asegurar su futuro económico en Arabia Saudita: Julián Quiñones.

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El delantero colombiano naturalizado mexicano se marchó luego de ser el artífice del bicampeonato azulcrema y dejó un enorme hueco por llenar en la institución. En 52 partidos con el plumaje águila, el también exjugador del Atlas anotó 23 goles y dio 10 asistencias en un lapso de un año futbolístico en Coapa. De éstos, 41 juegos fueron de Liga MX, en los cuales marcó 18 dianas y repartió siete pases para gol, antes de marcharse al Al-Qadisiya de la liga saudí, seducido por los exorbitantes sueldos que se manejan en Oriente Medio.

Su aporte ofensivo se sabía que sería duro de compensar tras su marcha, pero la cosa ha sido aún peor en la bancada milloneta. Con cuatro derrotas en seis partidos y un alarmante puesto 12 de la tabla de posiciones, los americanistas no solo han perdido juegos por montones, sino también poderío ofensivo, pues solamente han marcado siete tantos. De acuerdo con información de Sofascore, es el peor registro desde el Clausura 2020, mismo que se suspendió por la pandemia COVID-19.

En ese certamen, al cabo del mismo número de jornadas diputadas, los cremas llevaban los mismos siete goles que ahora. Para el Guard1anes 2020, la cuota subió a 12; luego se estancó en ocho para el Clausura 2021 y se elevó ligeramente para el Apertura 2021 con nueve. Más tarde, en el Clausura 2022 y en el Apertura 2022 fueron ocho tantos anotados en cada uno y para el Clausura 2023 se elevó al máximo alcanzado en este periodo con 14.

Ya en el Apertura 2023, con Quiñones en el club y en lo que fue el inicio de la consecución del bicampeonato, los de Copa sumaron 11 tantos luego de seis fechas disputadas, mientras que en el Clausura 2024 iban ocho hasta el momento. Por ello, el hecho de haber rozado el mínimo histórico de anotaciones en lo que va de la década, comienza a ser alarmante en el equipo más ganador de México con 15 títulos en sus vitrinas.

Y sobre todo, la salida de Quiñones rumbo al futbol árabe coincide con esta crisis ofensiva y confirma el peso que tenía con las Águilas, adonde llegó como promesa y se fue como ídolo del americanismo con la promesa de algún día volver para reavivar ese tórrido romance que protagonizaron hace poco tiempo.