América no pudo ganar en casa y se meterá el domingo al infierno del Toluca sin nada de ventaja, al empatar 0-0 con los Diablos en la ida de la Final del Clausura 2025, disputado en el Estadio Ciudad de los Deportes.

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Aunque fue un encuentro que claramente estuvo marcado por polémica arbitral, con un arbitraje deficiente. Sin embargo, si se hace a un lado eso, el Tricampeón no tuvo los argumentos para vencer al líder de la fase regular, que entendió muy bien que este primer juego era para salir vivo y conseguir el título en el Nemesio Diez.

La cuarta Final consecutiva para el América y la segunda también al hilo que jugó primero en su casa, por lo que las Águilas perfectamente entendían que tenían que sacar sí o sí algo de ventaja para el juego de vuelta; sobre todo, porque el duelo decisivo será en el durísimo infierno del Nemesio Diez en Toluca.

El estadio fue absoluto azulcrema y americanista, por lo que las Águilas intentaron aprovechar el factor local, ante unos Diablos que, de entrada, sufrieron la durísima baja del goleador Paulinho, quien ni siquiera salió a la banca debido a problemas físicos.

Con una preocupación menos en el ataque del rival, las Águilas se lanzaron en busca de abrir el marcador, pero desde el mero inicio de la Final de ida, Toluca propuso un juego ríspido y más hacia el ámbito físico.

El equipo de Antonio Mohamed parecía que traía la encomienda de meter la pierna fuerte y detener a toda costa a los azulcrema, algo que el árbitro Daniel Quintero Huitrón no detectó correctamente, porque en el primer tiempo hubo dos acciones muy polémicas que bien pudieron ser marcadas como penales a favor de las Águilas.

Si bien Toluca no tuvo a su goleador Paulinho en el campo, sí que estaba el mejor jugador de la Liga MX: Alexis Vega. El Capitán de los Diablos sabía que este juego era más de pelea, combate y resistencia, pero si tenía una a modo, la iba aprovechar.

Por eso fue que la primera acción de peligro en este cotejo, fue justo para los escarlatas; en una acción a contragolpe, Alexis habilitó al delantero paraguayo Robert Morales, quien jugó en lugar de Paulinho; el guaraní sacó disparo, tapó el arquero Luis Ángel Malagón y en el contrarremate la voló Vega.

Es decir que si bien el Diablo estaba contenido, en cualquier momento podía meter en serios aprietos al América por la gran calidad de los jugadores que tiene.

A partir de esa acción, América se mostró más incisivo y al 25′, un disparo del colombiano Cristian Borja dentro del área y casi sin ángulo, coqueteó con la línea de gol, ahogando el grito de festejo de todo el pueblo azulcrema.

Toluca respondió más adelante con otro disparo del paraguayo Morales que el arquero Malagón volvió a rechazar de gran forma y ya cerca del final del primer tiempo, América una vez más se acercó al gol al 41′, con un disparo de Álvaro Fidalgo, que el guardameta Luis García atajó de gran forma al recorrer su marco.

A esa altura del partido, ya habían sucedido dos acciones muy polémicas, que dejaron muy mal parado al cuerpo arbitral liderado por el silbante Quintero Huitrón, porque fueron dos situaciones que bien pudieron haberse marcado como penales.

La más clara, una acción en la que el defensa brasileño del Toluca, Luan García, sujetó a Henry Martín casi a la altura del cuello, cuando el delantero del América entraba al área en busca de un centro.

Otra jugada en la que Marcel Ruiz, en su intento por seguir la marca a Erik Sánchez, provocó que el “Chiquito” se tropiece también en la entrada del área. Y una más, en la que al parecer de nuevo hay un agarrón a Henry Martín, antes de que se marcara un fuera de lugar.

Por esas acciones fue que el técnico americanista, André Jardine, al finalizar el primer tiempo se acercó con el cuarto árbitro Adonai Escobedo, a conversar pero sin reclamos fuertes; sobre todo porque el brasileño viene de la suspensión en semifinales por reclamos.

El juego siguió su curso al segundo tiempo. Al no tener a su goleador estrella, Antonio Mohamed planteó un partido mucho más defensivo y a la contra; decidió esperar al América, a ver qué podía hacerle Jardine en la batalla táctica.

Como el Tricampeón no podía encontrar el gol, Jardine metió al 60′ a su cambio recurrente de Diego Valdés por Víctor Dávila, en tanto que diez minutos después, optó por sacar a Henry Martín del ataque y poner a Rodrigo Aguirre, más Alan Cervantes por Jonathan dos Santos; ambos cambios, hombre por hombre.

Mientras tanto, Mohamed no le movía nada a su equipo; sabedor de que tenía el partido donde lo quería, el Turco es un viejo lobo de mar y si hay alguien que le sabe al ajedrez táctico y más contra Jardine, es alguien como él.

La intención era que el partido se alargara, que cayera en un letargo y que las revoluciones fueran las menos en el América; ahí, quizá cazar a las Águilas con algún error en defensa.

Por eso es que casi al 80′, metió a Juan Pablo Domínguez en lugar del Canelo Angulo, para refrescar su ataque y a lo mejor que encontrara una combinación con Alexis o Robert Morales y así llevarse la victoria.

Pero lo más importante, que la pelota estuviera lo más lejos de su área y que se atascara en el mediocampo o en zonas donde no le representara peligro al Toluca.

Así fue que Mohamed mató la Final de ida, porque más allá de que el árbitro marcó o no las jugadas potencialmente de penal para el América, las Águilas y Jardine no supieron sacar al Diablo de su cueva y exponerlo para lastimarlo antes de que se regresara a su infierno.

Aunque antes de eso, Rodrigo Aguirre casi marca el 1-0 para el América, con una pelota a la espalda de los defensores, la cual culminó con un riflazo que pasó a nada de la portería del Toluca; también entraron Javairo Dilrosun y Ramón Juárez, pero solo para refrescar posiciones.

Los choriceros salieron ilesos de la visita a la Ciudad de México, en un hervidero completamente azulcrema, el cual el Turco Mohamed supo apagar poco a poco, hasta el final del partido.

El próximo domingo en el Infierno del Nemesio Diez, será el último juego de este Clausura 2025 y si bien el título está en el aire, la atmósfera ahí será completamente roja y endemoniada a favor del Toluca.

Eso es lo que tendrán los Diablos a su favor en busca de terminar una sequía de 15 años sin título, mientras que eso es parte de lo que América deberá superar y sobreponerse si es que quiere conseguir un histórico tetracampeonato. En tres días, Toluca será el epicentro del futbol mexicano.