AMLO reconoce que el Insabi fue un error administrativo

No funcionó para lo que estaba programado; sólo duró tres años y trasladó sus funciones al IMSS Bienestar



Cuartoscuro.com

El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) no funcionó para lo que estaba programado, pues no se logró el objetivo para el que fue creado.

Durante su conferencia de prensa matutina, explicó que cuando llegó al gobierno se dio cuenta de que el sistema de abasto de medicamentos y suministros médico estaba en manos de algunas cuentas empresas, en un proceso plagado de corrupción y por ello se determinó instaurar el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), pero reconoció que desde el principio este fue un tropiezo administrativo.

“Sirvió para eso y otras cosas, pero no era lo que originalmente estábamos pensando. Ahí tuvimos un tropiezo administrativo, se corrigió y ahí vamos”, apuntó.

El presidente refirió que durante su trabajo como director del Instituto Nacional Indigenista aplicó algunos programas en beneficio de la comunidad y buscaba replicar esos principios en materia de salud, pero finalmente no funcionó como esperaba el programa para sustituir el Seguro Popular.

“Hubo muchas resistencias y entonces cometimos… No cometimos, decidimos crear el Insabi buscando así resolver. Pero los de Insabi, y además las inercias, llevaban a que al final lo hiciéramos lo mismo: entregarles los fondos a los estados”, subrayó.

Sin embargo, aseguró que el Insabi sí permitió avanzar, porque gracias a él se logró que se pudieran comprar los medicamentos en el extranjero, porque ese negocio de la venta de los medicamentos lo tenían unos cuantos.

“Era un negocio jugosísimo, tenían tanto poder que no se podían comprar medicamentos en el extranjero, la ley no lo permitía. Tuvimos que cambiar la ley para poder comprar los medicamentos en cualquier parte del mundo. Era un monopolio, tenían el control de la compra de los medicamentos en beneficio de 10 empresas, que ni siquiera eran laboratorios, eran empresas”, precisó.

El presidente también se refirió a la desaparición de la agencia de noticias del Estado, Notimex, y dijo que en su administración no hubo un diálogo suficiente y consideró que sí es necesaria una instancia de esta naturaleza.

“Creo que también ahí faltó más diálogo y más atención de parte de nosotros, porque sí es importante tener una agencia del gobierno. Se suple con lo que se hace con el manejo de los medios públicos, pero no es igual. Sin embargo, estaba ya desatada la confrontación y no se pudo, quizá nos faltó más dedicación, más diálogo”, sentenció en un inusual mea culpa.

Historia breve

El Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) fue un organismo descentralizado sectorizado a la Secretaría de Salud que tuvo como finalidad proveer servicios de salud a las personas no derechohabientes a ninguna institución del sistema nacional de Salud y que apenas duró en funcionamiento tres años, entre 2020 y 2023.

Este Instituto fue creado el 1 de enero de 2020 por decreto del presidente Andrés Manuel López Obrador y sustituyó al Seguro Popular, el cual había sido fundado en el 2003.

Sus objetivos eran garantizar que no falte personal médico, de enfermería y técnico en las unidades de atención a la salud y asegurar un abasto suficiente de medicamentos, material de curación y equipos médicos en los establecimientos de salud, pero estos no se cumplieron.

El 31 de enero de 2020 se fijó un plazo para que las treinta y dos entidades federativas del país se adhirieran al nuevo organismo, sin embargo, nueve no firmaron el acuerdo de adhesión y empezó a operar en febrero de 2020 en los veintitrés estados que lo firmaron.

El director del Insabi durante los tres años que duró este organismo fue Juan Antonio Ferrer Aguilar, delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Campeche y de ahí pasó a encabezar el Insabi.

Después de tres años de funcionamiento y sin poder alcanzar los objetivos del Instituto, el presidente finalmente publicó el 29 de mayo de 2023, un decreto en el Diario Oficial de la Federación para sustituir al Instituto de Salud para el Bienestar por el Instituto Mexicano del Seguro Social para el Bienestar (IMSS-Bienestar), en la prestación gratuita de servicios de salud y medicamentos a las personas sin seguridad social.

Antes, la Cámara de Diputados aprobó por mayoría las reformas legales para concretar la desaparición del Insabi y dio paso al sistema IMSS-Bienestar, que ya operaba en el país y que ahora fue ampliado. Con ambos sistemas, el presidente prometió una y otra vez en que el sistema de salud en México sería como el de Dinamarca al concluir su administración, lo que evidentemente no sucedió.

Error garrafal

Desde que se decretó la desaparición del Insabi, en 2023, los críticos advirtieron que este sistema le costó millones de pesos al país y vidas humanas, pues el Seguro Popular garantizaba la atención para los más vulnerables.

El que fuera secretario de Salud, Salomón Chertorivski Woldenberg aseguró entonces que una de las peores decisiones de esta administración fue eliminar el Seguro Popular, porque significó un retroceso de cuatro décadas de experiencia en la cobertura de salud para centralizar la atención médica en el Instituto de Salud para el Bienestar.

El también diputado federal sentenció que la desaparición del Seguro Popular dejó en la indefensión a 53 millones personas beneficiarias en 2019, se perdieron 40 millones de consultas, cuatro años de esperanza de vida, la cobertura en salud de 15 millones de personas y 3 mil niñas y niños fallecieron a falta de medicamentos contra el cáncer.

Pero además, advirtió que el sustituto del Insabi, el sistema IMSS-Bienestar, también presenta graves problemas y sentenció que no se puede ahondar en el mismo fracaso del sistema de salud que esta administración se ha empeñado en mantener.