¡Bicampeón de Oro! México al fin derrotó a Estados Unidos en una Final y consiguió su segundo título en el año

Con goles de Raúl Jiménez y Edson Álvarez, el Tri le dio la vuelta al partido tras ir abajo en el marcador



Foto: Reuters

¡Bicampeones de Copa Oro! La Selección Mexicana se coronó este domingo al derrotar 2‑1 a Estados Unidos en el NRG Stadium en Houston, Texas, con lo que alzó su décimo título en este certamen de la Concacaf, aunque también ganó tres bajo el formato de Campeonato de Naciones.

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En total son 13 los títulos que ha ganado el Tri: 1965, 1971, 1977, 1993, 1996, 1998, 2003, 2009, 2011, 2015, 2019, 2023 y 2025. Esta última, con un nivel de regular a malo, pero al ser un torneo de Concacaf, le alcanzó para ganarlo.

Además, se quitó de encima una racha de seis juegos oficiales sin poder ganarle a Estados Unidos desde 2019, aunado a que Javier Aguirre consiguió su segunda Copa Oro tras también ganar la del 2009, amén de su tercer título con la Selección, por ganar la Nations League 2025.

Había dicho Javier Aguirre un día antes de esta Final, que no puede existir un plan perfecto, debido a todas las imponderables que hay en el futbol.

Y en efecto, cuando se trata de la Selección Mexicana, los mismos vicios, carencias y errores de siempre le siguen pasando factura, que con el tiempo parece que no hay manera de solucionar.

Ni habían pasado ni cinco minutos de la primera parte, cuando una falta absurda de Edson Álvarez en el mediocampo le dio a Estados Unidos la única arma con la que podía hacer daño a México: la pelota parada.

Por supuesto que no la iban a desaprovechar y luego de que Sebastian Berhalter cobró el tiro pegado a la banda derecha, la pelota viajó por el área, donde Chris Richards remató un cabezazo que pegó en el travesaño y luego picó adentro para el 1‑0 a favor de Estados Unidos.

Por primera vez en esta Copa Oro, México se fue en desventaja, y para su mala fortuna fue en plena Final, el partido en el que eso no podía suceder.

De lo bueno que ha mostrado este equipo de Javier Aguirre en la Copa Oro, es que tiene buena capacidad de reacción cuando se le complican los encuentros y, aunque se vio muy temprano abajo, la Selección Mexicana asimiló bien el golpe.

Se apoderó del balón, lo quitó completamente a Estados Unidos y monopolizó la posesión del esférico, al grado de que los dirigidos por Mauricio Pochettino tuvieron que echarse para atrás.

De nueva cuenta, Gilberto Mora comenzó a tomar los hilos del equipo. A este chavito de 16 años, no le asusta ningún escenario, rival, ni instancia, aunque sea una gran Final internacional.

Si bien había dominio de pelota, no había finalización de jugadas, por lo que Gil intentó con un disparo que el arquero Matthew Freese tuvo que contener.

Poco a poco, México se acercó con más peligro al área de Estados Unidos, que si bien resistía, empezó a confundirse con tanto toque y movimiento entre líneas del Tricolor.

Fue al minuto 27′ cuando cayó el empate. La jugada fue excepcional: pase de Marcel Ruiz al espacio, pero el movimiento de Raúl Jiménez fue de crack, sacó una raya dentro del área y dejó sin oportunidad a Freese.

El rugido del NRG Stadium fue estremecedor, porque la mayoría era afición mexicana, en un inmueble prácticamente lleno. Raúl sumó su gol número 43 con México, muy especial porque lo festejó con una playera del Tri dedicada a su fallecido compañero en los Wolves, Diogo Jota.

Con esa anotación, Jiménez se puso a nueve goles de alcanzar a Javier Hernández como máximo goleador del Tri, y a tres de Jared Borgetti, quien es segundo.

Tras el primer gol mexicano llegaron las sonrisas y la alegría en las gradas. Luego vino el gol estadounidense, como balde de agua helada, pero después volvieron los oles a favor del Tri, la atmósfera se volvió totalmente mexicana.

Se esperaba que antes del mediotiempo México consiguiera un segundo tanto, pero no fue así. César Montes fue amonestado por falta en tres cuartos, aunque esta vez Estados Unidos no capitalizó.

Así que fueron unos primeros 45 minutos con sus buenas y sus malas; les metieron gol de vestidor, pero también pudieron anotar, algo que no hacían desde el primer juego inaugural ante República Dominicana. Así, Javier Aguirre calmó sus nervios.

Poco después de iniciar el segundo tiempo, hubo una acción polémica en el área mexicana: Jorge Sánchez cometió una clarísima mano. Sin embargo, el árbitro guatemalteco Mario Escobar consideró que no fue deliberada, además de que el VAR no revisó la acción.

Usualmente, el Vasco es rápido con los cambios; sin embargo, en la Final esperó hasta los 70 minutos sin hacer modificaciones, confiando en que el mismo once inicial obtuviera la ventaja parcial.

Pero a esa altura, el Tricolor ya agotaba ideas, y el dominio del primer tiempo no eran tan claros en el segundo.

Ante tal situación, el técnico nacional sacó a Gil Mora, ovacionado por el estadio, y metió a Orbelín Pineda en busca de mejorar la transición ofensiva.

El juego había entrado en una etapa donde cada error podía ser fatídico, por lo que ningún equipo quiso arriesgarse.

Sin embargo, Estados Unidos regaló una falta a México en tres cuartos de cancha y así como encontró su gol, el Tri marcaría el segundo.

Al minuto 77′, en una pelota parada pegada a la banda izquierda, Alexis Vega cobró con rosca interior; Johan Vásquez peinó la pelota y Edson Álvarez entró solo para rematar a placer y poner el 2‑1.

El árbitro asistente levantó la bandera, por lo que Escobar anuló el gol. Sin embargo, tras revisión del VAR, se comprobó que “Machín” estaba habilitado, por lo que el segundo gol fue validado y la afición en Houston explotó en júbilo.

El bicampeonato de Copa Oro ya estaba en la bolsa, así que México solo tenía que aguantar los últimos minutos; entraron Santiago Giménez y César Huerta para refrescar el ataque. En una jugada, el delantero del Milan se lastimó un dedo, pero se lo acomodaron en el campo.

Estados Unidos intentó rescatar el empate, pero está claro que este equipo no es el principal de ellos y que les faltaron figuras como Christian Pulisic, Weston McKennie, etc.

El Tri cerró este verano con su segundo título oficial del año, tras ganar en marzo la Nations League, por lo que de aquí al Mundial 2026 serán amistosos ante rivales de mayor nivel.

Aunque la realidad es que a esta Selección Mexicana le sigue faltando mejorar; tiene que demostrar que puede entregar un nivel superior si quiere hacer historia en el Mundial 2026.

Foto: Reuters