ZINACANTEPEC, ESTADO DE MÉXICO, 26OCTUBRE2023.- La comunidad de Santa Cruz Cuauhtenco en Zinacantepec se distingue por la elaboración de pan de fiesta, pero durante la temprana de Día de Muertos también elaboran pan de figuras como muñecas, palomas, hombre águila, corazones, calaveras entre otros, conocido como pan de muerto y que se coloca en las ofrendas tradicionales. La familia Paredes Pichardo encabezada por Don Armando y Doña Lourdes se dedican a elaborar este pan y comienza su trabajo días previos a esta celebración, ellos sus hijas e hijos, sus parejas y hasta sus nietos se dedican a llevar sabor a las ofrendas que son instaladas en los hogares mexiquense, siendo ya 5 generaciones involucradas en esta dulce tradición. Los sabores que trabajan sin naranja, vainilla, nuez y mantequilla y los tamaños van desde los 100 gramos hasta 1 kilo, o 2 kilos si son pedidos especiales, sus precios parten de los 7 pesos la pieza hasta los 60 pesos. Hacen un llamado para visitar y consumir el pan que se elabora en la comunidad de gran sabor. FOTO: CRISANTA ESPINOSA AGUILAR /CUARTOSCURO.COM Aida Ramírez / Ovaciones
Foto: Cuartoscuro.com
Al cierre del sexenio no hay cifras confirmadas sobre el beneficio de las medidas de política económica aplicadas, además de que la debilidad del Estado de derecho, la corrupción, la violencia e inseguridad, limitan una mejor opinión sobre el nivel competitivo de nuestro país.
LEE ADEMÁS: Tercer Debate Chilango: Estos fueron los temas qué debatieron los candidatos a la Jefatura de Gobierno CDMX
Por ello, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), afirmó que “no basta el discurso oficial para garantizar la solidez de la economía”, toda vez que “no solo un sistema fiscal sencillo y equitativo es importante en materia de competitividad. También se requiere la mayor eficiencia posible en la asignación de los recursos públicos.
“El objetivo principal es mejorar el bienestar de los hogares, pero a través de mayor inversión y programas eficientes de empleo que aseguren un ritmo de crecimiento sostenido en el mediano y largo plazo”, aseveró.
De ahí que, sostuvo en su análisis semanal, que el deterioro en competitividad y la baja en las expectativas de crecimiento, reflejan la necesidad de mayores esfuerzos para consolidar un mayor dinamismo de la actividad productiva y del bienestar de la población.
“La mayoría de las expectativas apuntan a un menor dinamismo para este año y uno con mayor debilidad para el próximo. Esto como consecuencia de la estacionalidad del primer año de gobierno, además de los efectos de un menor gasto estimado como resultado de la conclusión de los proyectos prioritarios del actual gobierno”, señaló.
El organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), consideró que la tarea “será compleja para quien sea el ganador de las elecciones próximas. El objetivo principal es mejorar el bienestar de los hogares, pero a través de mayor inversión y programas eficientes de empleo que aseguren un ritmo de crecimiento sostenido en el mediano y largo plazos”.
Y es que observó que en materia de crecimiento, después de una lenta recuperación postpandemia, las cifras más recientes muestran una tendencia a la baja, pues de acuerdo con la estimación oportuna del INEGI, en el primer trimestre de este año el PIB habrá crecido a una tasa anual de 2.0%, lo que representa su menor avance desde la caída de 2.1% en igual lapso de 2021.
Y “aun cuando se llegase a cumplir el pronóstico oficial de un incremento de 2.5% para este 2024, la tasa promedio de crecimiento durante todo el sexenio será de solo 1.1%, la más baja al menos en los últimos cinco sexenios”.
No obstante, y a pesar de que en esta administración una importante parte del gasto se ha concentrado en programas y proyectos prioritarios del gobierno, éstos “no han mostrado un impacto significativo en el crecimiento de la economía. Recursos canalizados a programas asistenciales y proyectos poco rentables social y económicamente ha sido la pauta del gobierno. Ni más crecimiento ni menos pobreza, sobre todo la extrema, son el resultado”.
El CEESP señaló que de manera evidente, las acciones oficiales a lo largo del sexenio no han tenido ese empuje en la confianza de los agentes económicos como tanto se afirma. El deterioro en el ranking de competitividad mundial, donde México se ubica en el lugar 56 de 64 países -según el Centro Mundial de Competitividad- en 2019, así como el ajuste a la baja en las expectativas de crecimiento, “son ejemplos de la necesidad de mayores esfuerzos para consolidar el entorno de un mayor dinamismo de la actividad productiva del país y del bienestar de la población”.
Mientras que la eficiencia gubernamental, dentro de la cual se consideran aspectos como finanzas públicas, la política fiscal y la deuda pública, es un factor importante dentro del indicador de competitividad, México “se encuentra en el lugar 60 en materia de eficiencia gubernamental”, según el mismo Centro.
“La preocupación aumenta cuando se observa que la percepción generalizada señala que los factores que mayor problema generan para hacer negocios son la corrupción y el ambiente de crimen e inseguridad, en general, factores de no fácil resolución y que muestran la debilidad del estado de derecho”, dijo el CEESP.
