El conjunto de los Bravos de Juárez firmó un valioso empate ante los Pumas de la UNAM, que permite mantenerse en la pelea por avanzar a la Fiesta Grande del futbol mexicano. Del otro lado, el cuadro de la máxima casa de estudios dejó escapar una gran oportunidad para sumar de a tres, pero no pudo y ahora mismo está fuera de puestos de Play In.
El duelo, correspondiente a la Jornada 15 del Clausura 2025, se jugó en la cancha del Estadio Olímpico Universitario. El resultado refleja con fidelidad lo que fue el partido: un enfrentamiento trabado, sin claridad ofensiva y con escasas aproximaciones al arco rival.
Ambos equipos saltaron al terreno de juego con un esquema espejo 4-2-3-1, priorizando el orden defensivo sobre la iniciativa al ataque. Pumas tuvo un ligero dominio en la posesión (55.3 por ciento) y generó más intentos al arco (9), pero ninguna de esas oportunidades logró inquietar al arquero de Juárez, ya que el equipo universitario no logró disparar entre los tres palos.
Del otro lado, Juárez apostó por un bloque compacto y resistió sin muchos sobresaltos, aunque tampoco generó peligro real, con apenas cuatro disparos totales y cero remates a portería. El empate, aunque insípido, le permite a los Bravos mantenerse la disputa por clasificar con 23 puntos, firmes en la zona de Play-In. Para Pumas, el panorama es más complejo: el equipo suma apenas 18 unidades y ve reducidas sus aspiraciones de alcanzar la fase final del torneo.
El encuentro entre Pumas y Juárez fue un partido de lucha, pero sin la chispa necesaria para romper el cerrojo. Los universitarios, aún golpeados por su eliminación en Concachampions, no encontraron la fórmula para superar a un Juárez ordenado pero limitado en ataque. La afición auriazul, que llenó el Olímpico Universitario, se fue con la sensación de que el equipo necesita recuperar su garra para lo que resta del torneo.
Desde el arranque, Pumas, dirigido por Efraín Juárez, buscó imponer condiciones en casa. Con una alineación que incluía a jugadores como Rogelio Funes Mori, Leo Suárez e Ignacio Pussetto, los universitarios intentaron abrir el marcador temprano.
Al minuto 37, Suárez tuvo una clara en un mano a mano, pero su definición se fue por un lado del arco defendido por Sebastián Jurado.
Juárez, por su parte, apostó por la solidez defensiva, con Moisés Mosquera y Diego Campillo cerrando espacios, aunque sin generar peligro real en el arco de José Padilla. Hacia el final del primer tiempo, un centro de Rodrigo López encontró a Pablo Monroy, quien no logró conectar un remate certero.
La afición, expectante, mostró su descontento con abucheos al sonar el silbato del medio tiempo, reflejando la falta de emociones.
En la segunda mitad, Pumas refrescó su ataque con los ingresos de Jorge Ruvalcaba y Guillermo Martínez por Pussetto y Suárez, buscando mayor profundidad.
Al minuto 80, Ruvalcaba protagonizó un desborde vibrante por la banda, llegando a línea de fondo y enviando un centro que Martínez no pudo rematar con claridad. Juárez mantuvo su postura conservadora, con Dieter Villalpando y Madson intentando algún contragolpe, pero sin inquietar a la zaga felina, liderada por Nathan Silva y Lisandro Magallán.
A pesar de los intentos, el partido careció de precisión en los últimos metros, y el marcador no se movió.
El partido terminó entre abucheos en las gradas, reflejo del desencanto de la afición universitaria ante una actuación sin chispa ni profundidad. Con sólo dos fechas restantes, el margen de error para ambos clubes se acorta.