La carga de enfermedades en México, como diabetes, hipertensión arterial y la enfermedad renal crónica, dijo David Kershenobich, secretario de Salud, durante su participación en la conferencia mañanera de la presidenta Claudia Sheinbaum, exige que la gratuidad de los medicamentos, “que es muy importante para el contexto de estos padecimientos, porque mejora el apego al tratamiento de las personas, quienes, de otra manera, tendrían dificultades obtener estos medicamentos”.

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En ese sentido, sostuvo, “el poder de la compra pública es muy significativo y relevante, y para ello es esencial crear un ‘ecosistema en biofarma’, que permita avanzar hacia una política establecida en el Plan México y que consiste en la producción de medicamentos, vacunas e insumos médicos“.

Para ello, explicó Kershenobich, “el Plan México tiene como propósito fundamental desarrollar parques industriales en donde existan bioincubadoras de la industria farmacéutica que coloquen a México como un sitio de producción de estos fármacos, de estas vacunas y de estos dispositivos médicos”.

Lo que se requiere no sólo es inversión pública, enfatizó el funcionario, sino un “ecosistema” que consolide el desarrollo de esta propuesta: “Y para ello es necesario instalar clusters de innovación que permitan el emprendimiento de la industria nacional y fundar un centro de creación de talentos, recursos humanos que México tiene y que se vuelvan altamente especializados“.

Este ecosistema deberá funcionar también como un hub logístico, adelantó Kershenobich, “es decir, que involucre a los medicamentos, pero también otras estructuras, como la industria química, para contar con los principios activos con los que se preparan los medicamentos; así también, tener una relación con la ingeniería biomédica, que es muy importante”.

Todo lo anterior forma parte de un plan integral para el desarrollo de la biofarma durante esta administración, y para completar este ecosistema, dijo, “vamos a contar con la participación de las universidades y centros educativos, y el papel central de la propiedad intelectual, pues deseamos fomentar las patentes producidas en México, para convertir a nuestro país como un centro o líder de la política de desarrollo de farmacia e insumos médicos”.