Caso Cruz Azul vs. Rodrigo Huescas; entre ir a Europa a la ‘brava’ y los errores de directivos

La Máquina ya demandó al jugador, sus representantes y al Copenhague, pero también hubo errores desde la dirigencia celeste



El huracán que se ha desatado con la novela entre Rodrigo Huescas, sus representantes, Cruz Azul y el Copenhague, es una tormenta en la que se juntaron diversos elementos, decisiones y errores de ambas partes, que tienen hoy de nueva cuenta al futbol mexicano en un escándalo internacional. 

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Es una situación en la que ninguno de los dos lados tiene la razón, ni la verdad absoluta, porque para que un caso de estos suceda (lo cual no es nuevo con un jugador y un club de la Liga MX), tienen que haber pasado varias circunstancias en un lapso de tiempo considerable y no es algo que suceda de la noche a la mañana.

Irse a Europa a la ‘brava’; Huescas le hizo caso a sus representantes y se fue sin estar firmado

Guiado por sus representantes Santiago Arbide y Alejandro García con su agencia AmEro Sports Management, el futbolista de 20 años decidió irse de México sin que la cláusula de rescisión de su contrato, la cual ha trascendido es de dos millones de dólares, fuera activada (pagada) por el Copenhague antes de que el futbolista emprendiera el viaje a Austria, donde el club danés realiza su pretemporada.

Eso molestó a la directiva de Cruz Azul, si bien el técnico Martín Anselmi lo convocó con normalidad para el entrenamiento del lunes, al cual lógicamente Huescas ya no acudió al estar en territorio europeo junto a sus agentes.

De ahí, Cruz Azul tomó la decisión de interponer la demanda ante la FIFA, al considerar que hubo una violación al reglamento de transferencias internacionales, al no recibir ningún pago antes de que el futbolista dejara al equipo celeste, más allá de que posteriormente el equipo danés hiciera o no la transferencia, una vez que realizara los exámenes médicos de rigor. 

En su postura pública oficial, el club esgrimió que jamás le dio via libre al jugador para irse el domingo pasado, toda vez que el propio jugador en el Aeropuerto dijo que Cruz Azul le había dado su anuencia, lo cual la institución mencionó que fue de manera “falsa y malintencionada”.

“La decisión de Rodrigo Huescas, de rescindir unilateralmente de forma anticipada y sin justa causa su vínculo con Cruz Azul, refleja la mala fe con la que él y sus asesores se dirigen, bajo la supuesta ejecución de la cláusula de terminación de contrato que legalmente no resulta procedente”.

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Explicó además que eso no significa que se hayan puesto en el camino del jugador para que cumpla sus sueños de ir a Europa y lamentó que la relación con Huescas haya terminado de dicha forma y tan abrupta.

También ha trascendido que el Copenhague quería pagar en dos abonos la cláusula de rescisión, un primer pago a la llegada del jugador y el otro hasta 2025, lo cual por supuesto tampoco aceptó Cruz Azul, amén de que al no haber dinero de por medio, el club comprende que el futbolista no tendría que haberse ido antes de que su contraro finalizara.

Tanto así, que el sábado pasado fue titular ante Mazatlán en el inicio del Apertura 2024 y al término del encuentro, el técnico Anselmi dijo que en el caso de Huescas y de Uriel Antuna, no tenía claro qué iba a suceder, aunque la realidad es que el propio Rodrigo a su salida del Estadio Ciudad de los Deportes se despidió de personal del club frente a la prensa.

Los errores de Cruz Azul con Rodrigo Huescas

De parte de Cruz Azul también habría mucha responsabilidad. El contrato de Rodrigo Huescas con la Máquina culminaba hasta el 30 de junio del 2025, es decir que le quedaba un año de contrato con la trascendida cláusula de dos millones de dólares; cifra que se puede considerar baja, si se toma en cuenta que Huescas es uno de los mejores prospectos no solo del equipo sino del futbol mexicano.

Al ser un jugador con gran proyección, porque también ha sido llamado a la Selección Mexicana y, por ejemplo, ya jugó el Maurice Revello en Francia con la Sub-23, era uno de los activos más importantes del conjunto cementero para una eventual venta a futuro.

El asunto fue que desde la parte dirigencial de Cruz Azul, ni Oscar Pérez, otrora director deportivo en 2023, ni Iván Alonso, actualmente en ese puesto, lograron la renovación del contrato de Rodrigo Huescas. Es decir, blindar al futbolista para que si algún equipo de México o del extranjero llegara a interesarse en el futbolista, al club le entrara mucho más dinero por una cláusula de rescisión más cara y no solo de dos millones de dólares.

Eso no quiere decir que los directivos no lo hayan intentado, y de hecho, el propio club también lo puntualizó en su comunicado al establecer que buscaron renovar su contrato desde hace diez meses, si bien responsabilizó a los agentes Arbide y García de aprovechar eso a su favor.

“Dichas mejoras fueron revisadas y aceptadas por sus representantes, quienes en una clara posición de ventaja, aprovecharon dicha información para promover al futbolista e inducir el rompimiento de su contrato”.

Sea porque los agentes de Huescas manejaron al jugador para que no aceptara ninguna renovación o porque la directiva celeste no actuó bien, pero la realidad es que el futbolista encontró la manera de irse a Europa a un bajo precio y hasta el momento parece ser que lo consiguió, a menos que el Copenhague se eche para atrás.

El fichaje de Jorge Sánchez y las posibilidades de jugar para Huescas

Aunado a todo lo anterior, también se le suma que Cruz Azul le fue preparando el camino a Rodrigo para que este quisiera irse de la institución. Porque si bien Jorge Sánchez llegó en este verano para ocupar la lateral derecha, misma posición que Huescas, desde diciembre lo estaban buscando.

En aquel momento, el titular de la Selección Mexicana no pudo llegar a la Máquina porque el Porto no quiso soltarlo ya que le quedaban seis meses de préstamo aún por parte del Ajax; por lo que Sánchez tuvo que esperar hasta mediados de año para dejar Portugal y regresar a México. 

De manera tal que ante tal escenario, eso bien pudo a ayudar a que Huescas jamás firmara una renovación con Cruz Azul, ni en diciembre, ni en junio, ni nunca, porque muy probablemente hubiera jugado mucho menos con Jorge Sánchez por encima de él.

Alargar su relación laboral con el club y encarecer una eventual venta, habría complicado su salida del futbol mexicano al europeo, tal cual le ha pasado a muchísimos jugadores en el pasado y en el presente, uno de ellos, Jesús Orozco Chiquete, quien tiene el interés del Anderlecht de Bélgica pero Chivas no lo quiere soltar porque quiere más dinero.

A la novela Cruz Azul vs. Huescas, aún le faltan algunos capítulos por escribirse y si bien muy probablemente se desenrede en los próximos días, queda claro que se conjugaron errores de ambas partes, para que el jugador se fuera así, aunque la realidad es que a México le urge que salgan futbolistas al Viejo Continente.