JOSÉ ANDRÉS DÍAZ
Foto: David Tamayo / El Occidental
Las Chivas Rayadas del Guadalajara, tuvieron una magna fiesta cien por ciento rojiblanca junto a su gente, en el amistoso de este domingo al medio día en el que derrotaron al Athletic de Bilbao 2-0 y en penales 4-2, por el trofeo Árbol de Gernika en el Estadio Akron.
Un encuentro que también marcó el debut de Erick Gutiérrez con el Rebaño Sagrado, si bien solo le falta hacerlo en un partido oficial y el cual será en la próxima Leagues Cup.
También, este partido sirvió para el regreso de Alexis Vega, quien no pudo estar ni con la Selección Mexicana en el verano, ni tampoco en el inicio del Apertura 2023, luego de ser sometido a una intervención quirúrgica en la rodilla.
Ambos jugadores saltaron como titulares en este encuentro y el estratega serbio, Veljko Paunovic, les dio 45 minutos para que se mostraran ante su gente y fueran tomando ritmo de cara al torneo en Estados Unidos.
En cuanto al partido, de nueva cuenta la cantera rojiblanca está respondiendo en este inicio de año futbolístico. A los 16 minutos, Alejandro Mayorga incursionó por banda izquierda y por velocidad se llevó a su marcador; metió centro raso y en el centro del área apareció Pável Pérez para marcar el 1-0 en el partido y fusilar al arquero Unai Simón.
Y es que el Rebaño Sagrado, que ya está en ritmo futbolístico y que viene de tres victorias en tres juegos de liga, aprovechó también que el Athletic de Bilbao está en plena pretemporada, además de que el horario atípico para jugarse el partido, debido a que el duelo fue transmitido vía Youtube para el País Vasco en Bilbao, por lo que se tomó en consideración las ocho horas de diferencia con Europa.
Para la parte complementaria, Veljko Paunovic sacó a Vega y a Gutiérrez Galaviz, para darle oportunidad a sus chavos Yael Padilla y Jesús Brígido, quienes fabricaron la jugada para el segundo gol.
Al 72′, un precioso pase filtrado de Jesús Brígido para la entrada de Yael Padilla al área, el juvenil de 17 años la definió con un disparo pegado al poste en el que el arquero Alex Padilla, de ascendencia mexicana y quien entró para el segundo tiempo, no pudo hacer nada.
Terminado el tiempo regular, las Chivas se llevaron el marcador por 2-0, pero el trofeo Árbol de Gernika, se tenía que definir por los penales debido al formato del encuentro.
Ahí, la escuadra local volvió a demostrar su superioridad y ganó 4-2, con lo que el galardón se quedó en territorio mexicano, en un amistoso en el que también se celebró la identidad, toda vez que el Athletic de Bilbao juega con puros jugadores naturales del País Vasco, misma situación que Chivas con puros mexicanos.
