Con una clausura simbólica del Tribunal Electoral de la Ciudad de México y flanqueada por los excandidatos a la presidencia de la República y jefatura de Gobierno Xóchitl Gálvez Ruiz y Santiago Taboada, respectivamente y la activista Yndira Sandoval Sánchez, Alessandra Rojo de la Vega, alcaldesa electa de Cuauhtémoc acudió al Tribunal Electoral de la Ciudad de México para exigir al magistrado presidente interino, Armando Ambriz Hernández que no utilicen la ley para proteger a las mujeres víctimas de la violencia por razón de género para intentar anular la elección de la demarcación.

Es vergonzoso, advertían, que se justifique el uso indebido de los derechos políticos de las mujeres como es la violencia política para pagar pactos políticos, advirtieron en la puerta del órgano electoral bajo una manta donde se leía “clausurado”.

Durante los mensajes pidieron que ya no se debe utilizar a las mujeres de pretexto, “no somos un moñito de solapa de los magistrados”, afirmaban, al tiempo que le exigían al magistrado presidente interino resolver con apego a la ley.

“Basta de usarnos a las mujeres de pretexto, no somos el moñito de los magistrados. Armando Ambriz, muchas de las firmantes y promoventes acudimos para solicitar nuestro derecho de audiencia, para que conozcan nuestros argumentos, a las mujeres que vemos con nuestras gafas violeta, las que no tenemos miopía política y social, vamos a exponer que no se acredita ninguna violencia política en contra de la candidata que fue derrotada en las urnas, que no sea la defensa de las mujeres contra la violencia una herramienta para intentar anular una elección”, exigió la activista.

Alessandra Rojo de la Vega, fue denunciada ante la autoridad electoral por su ex contrincante política Caty Monreal por presuntamente haberla invisibilizado, nulificar e incluso estereotipar en la contienda electoral, presuntamente por ser hija del morenista Ricardo Monreal Ávila.

Dentro de los argumentos que expuso la ex candidata morenista fue porque consideró que hubo una “inequidad mediática”, ya que los medios de comunicación dieron seguimiento informativo a la denuncia que hizo Rojo de la Vega sobre el atentado del que fue víctima rumbo a la elección del pasado 2 de junio.

Ante ello, Ismael Betanzos, dirigente del PRI en la Ciudad de México, dijo que no quedaba duda de que Rojo de la Vega obtuvo el triunfo en la contienda electoral, además de que se cuentan con los elementos legales y jurídicos para demostrarlo.

Por su parte, Xóchitl Gálvez advirtió que Alessandra Rojo de la Vega no incurrió en ningún supuesto de violencia política por cuestión de género, ya que los argumentos de la ex candidata no están contemplados como tales, por lo que justificó que tanto Rojo de la Vega como Caty Monreal se dijeron cosas y se atacaron el en calor de la contienda.

Ante lo dicho por la ex candidata presidencial de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, la morenista y ex candidata a la alcaldía Cuauhtémoc a través de sus redes sociales la acusó de mentir con el propósito de “afectar el orden institucional que las feministas hemos construido”.