Aida Ramírez / Ovaciones 
Foto: Cuartoscuro.com

El endeble estado de derecho que se vive en el país está haciendo estragos en el pequeño comercio de varias entidades, ya que bandas criminales están obligando a sus dueños a vender cigarros ilegales.

De lo contrario, amenaza con quemar los negocios o aplicar castigos corporales, como los tablazos que se ha visto dan a los choferes de Acapulco, Guerrero, denunció la organización Consejo para el Desarrollo del Comercio en Pequeño y la Empresa Familiar (CONCOMERCIO).

Gerardo López Becerra, presidente del organismo, aseguró que, contrario al optimismo que reportan representantes de los tres órdenes de gobiernos, lo cierto es que las bandas criminales han tomado tanta fuerza, que hoy en día son quienes definen la pauta comercial en algunas zonas del país, imponiendo un auténtico escenario de “terrorismo” al chantajear a negocios y comercios.

“Los pequeños comercios del país son víctimas permanentes del clima de inseguridad que azota al país, pues además del llamado robo hormiga, el pago de derecho de piso y atracos recurrentes, ahora deben padecer los embates del crimen organizado, convertido en el principal distribuidor de diferentes productos ilegales, como los cigarros de contrabando o robados que son introducidos a negocios mediante chantajes y extorsión para que sean exhibidos y vendidos; y si los dueños se niegan pueden ser víctimas de ataques a su integridad o negocio”, afirmó.

Como evidencia de dicha situación, señaló que la Fiscalía General del estado de Guanajuato llevó a cabo un operativo en el municipio de San Felipe, el pasado 25 de abril, que derivó en el aseguramiento de un arsenal de equipo táctico (52 armas de fuego, 34 cargadores y tres mil cartuchos de armas), así como sustancias ilícitas, dinero en efectivo y más de 130 mil cigarros de tabaco destinados a la distribución comercial. López Becerra advirtió que el fenómeno del crimen organizado como distribuidor de tabaco ilegal tiene graves consecuencias que van más allá del tema comercial.

“Por un lado los dueños de comercios, misceláneas, tiendas de abarrotes y pequeñas fondas son extorsionados para vender dichos productos con el riesgo de perder su vida y su patrimonio.

“Y, por el otro, se encuentran los graves riesgos a la salud que implican los cigarrillos ilícitos, porque son productos que no cumplen con normas de calidad y seguridad, pues se han detectado que traen residuos de pasto, periódico, cartón y hasta heces fecales”, explicó.

El presidente de CONCOMERCIO lamentó la indiferencia de las autoridades de los tres órdenes de gobierno, toda vez que según datos oficiales, tienen bien identificados las entidades con los mayores incidentes de inseguridad, como el caso de Guanajuato que encabeza el listado nacional de homicidios, con 481 asesinatos en el primer bimestre del año, seguido por el Estado de México (con 418 casos); y Baja California (415 incidentes).

Sin embargo, el empresario lamentó que con todo y esa radiografía de datos que disponen las autoridades, las autoridades no han emprendido acciones coordinadas e integrales para revertir este escenario.

De acuerdo con un estudio del Instituto Oxford Economics, se estima que, en México, casi el 20% de los cigarros de tabaco que se comercializan en el país, son de origen ilegal y la merma fiscal que representa la proliferación de los cigarros ilegales podría superar los 13 mil 500 millones de pesos al año.

Gerardo López advirtió que de no detenerse la extorsión a negocios pequeños a manos del crimen organizado, ello “puede provocar un colapso de salud y económico de tamaños titánicos para el país, pues habrá un cierre masivo de empresas, desempleo, desplome de ingresos públicos, suspensión de programas sociales, inseguridad, entre otras consecuencias; es claro, se necesitan acciones inmediatas; el proceso electoral 2024 no puede ser pretexto para no resolverlo”, puntualizó.