Le pasa por encima a Pumas y deja sentenciada la serie

En los primeros 12 minutos mete tres goles para definir todo y en el segundo clava la puntilla; UNAM, sin capacidad de reacción.- Alvarado, Baca y Romo (2) los anotadores

Pita la Máquina y Pumas ni las garritas mete.

No quedó rastro de los que se presumían sublíderes del Guard1anes 2020.

El Cruz Azul barrió cada esquina del estadio Azteca con el prestigio de los Pumas, al propinarles una goleada de 4-0 en la semifinal de ida y deja sentenciada la eliminatoria y su calificación a la final.

Cruz Azul se valió de un arranque ciclónico, donde tuvo el factor contundencia de su lado, porque en apenas 12 minutos anotó tres goles, aprovechando que UNAM salió dormido, nervioso, titubeante, porque recibir el primer tanto a los 2 minutos los dejó en shock y no se repusieron nunca. Ya lo demás fue trámite, los universitarios buscaron reaccionar sin éxito y aunque generaron algunas ocasiones, fue más porque la Máquina desaceleró, y aún así, los cementeros todavía clavaron uno más, el cuarto clavo en el ataúd universitario.

 

1,2,3… Y A OTRA COSA

Los celestes se encargaron de revivir los traumas del conjunto universitario en el Apertura 2018, cuya semifinal terminó en desastre: una eliminación a manos del América, por global de 7-2; seis de esos tantos se dieron en el Coloso de Santa Úrsula.

De manera fugaz, los cementeros pegaron fuerte sobre la mesa, para adelantar el 1-0, con anotación de Roberto Alvarado, a los 2 minutos.

Los universitarios recibieron el golpe, estaban incrédulos, no sabían qué hacer. Pero el letargo auriazul no quedó ahí. A los siete minutos, las redes se sacudieron violentamente con el 2-0, cortesía de Rafael Baca, con un cañonazo.

Y por si quedaba incredulidad alguna en los felinos, un tercer gol cayó, cortesía del juego colectivo de Pineda, Alvarado y Luis Romo, a los 12 minutos.

Así, en menos de 15 minutos, los Pumas echaron en saco roto la buena temporada de sólo una derrota y el mérito de Andrés Lillini como técnico revelación.

 

NOCHE DE PESADILLA

Y si los tres goles no fueron suficientes, los universitarios cargaron con más desesperación por la inoperancia de su defensa y las nulas oportunidades de buscar el arco rival.

Cruz Azul manejaba el trámite del juego, incluso dando la impresión que desaceleró tras la amplia ventaja tempranera.

Y aunque los felinos tomaron un respiro gracias a eso, no lograron llegar con peligro a la cabaña de Corona.

 

QUISO Y NO PUDO

Jonathan Rodríguez estuvo cerca de la cuarta anotación a segundos de que inició la segunda parte. Un tiro cruzado del uruguayo les advirtió que el asunto podría ponerse peor.

Sin embargo, los cambios obligados de Lillini le dieron una mejor cara a su equipo, al menos, ya era competitivo con los ingresos de los atacantes Juan Iturbe y Sebastián Saucedo, que sustituyeron al mediocampista Facundo Waller y al lateral Mozo (46’).

Aunado a que los jugadores celestes ya no pisaban a fondo el acelerador y lucía más relajados.

Presentes en sector rival, los Pumas comenzaron a exigirle al guardameta Jesús Corona, quien atajó sin complicaciones disparos frontales de Juan Ignacio Dinenno, Saucedo y de Iturbe.

Tarde, pero los del Pedregal ya se hacían notar en el cotejo.

 

EL VAR TAMBIÉN JUGÓ

La velada también fue un tanto exigente para el arbitraje, mas Jorge Isaac Rojas se mantuvo acertado y en comunión con el VAR.

A los 64’, los de Robert Dante Siboldi cantaban el cuarto gol de la noche, obra de Roberto Alvarado tras un rechace del meta felino; sin embargo, desde la cabina del videoarbitraje detectaron un fuera de lugar que originó esa jugada que fulminaba toda esperanza de los Pumas.

A los 73’, el VAR volvió a intervenir para revisar una posible mano del cementero Pablo Aguilar en el área, pero el juez central tras analizarla no la consideró penalti.

 

EL TIRO DE GRACIA

Por más que intentaban rescatar un gol de visitante, los Pumas no conseguían generar una jugada clara, la defensa azul se plantó férrea y con salidas que apostaban al contragolpe para agotar lo que restaba del cronómetro.

A consecuencia de las líneas adelantadas, una de esas contras resultó fatal para los de Universidad Nacional, que sucumbieron a la velocidad y definición de Romo, en pase filtrado por Santiago Giménez, convirtió el 4-0.

Con el último clavo, los Pumas están obligados a ganar la vuelta, el próximo domingo en Ciudad Universitaria, mínimo por cuatro anotaciones y que los de Siboldi se queden en blanco, algo que resultaría imposible tras la exhibición celeste de anoche y de la semana pasada, cuando también finiquitó a los Tigres desde el primer juego.

LOS GOLES

1-0, minuto 2. Tras un tiro de esquina, un rechace de la zaga, contrarremate de Orbelín Pineda y la incapacidad de Alan Mozo para marcar, Roberto Alvarado aprovechó que la esférica lo alcanzó dentro del área, para empujarla al fondo de las redes sin que el achique del arquero Julio González fuera problema… Todos eso, al minuto y 39 segundos de iniciada la serie.

2-0, minuto 7. En un pase retrasado de Ignacio Rivero, Rafael Baca, desde las afueras del área, desenfundó un potente disparo que fue imposible de atajar para el guardameta suplente de Alfredo Talavera.

3-0, minuto 12. Las equivocaciones de la zaga felina no cesaron y otra vez, en una pifia de Mozo al perder el balón y una rápida triangulación, Luis Romo la finiquitó con un disparo al costado derecho que antes besó la base del poste, para el 3-0.

4-0, minuto 95+. El árbitro dio ocho minutos y si Pumas pensaba en un golecito de visitante, le clavaron la puntilla en un contragolpe donde Giménez habilitó a Luis Romo, quien se metió al área y punteó sobre la salida de González para cerrar la cuenta.

 

12 AÑOS PARA ELIMINAR OTRA VEZ A PUMAS

Cruz Azul está cerca de romper con la hegemonía de los auriazules, quienes han avanzado en cuatro de las últimas cinco ocasiones que chocaron en Liguilla. En el Apertura 2008, los celestes resultaron airosos en los Cuartos de Final.

 

RECOBRAN LOCALÍA

Con la victoria de anoche, el Cruz Azul dejó en tres su racha de derrotas al hilo como local. Desde julio del 2015 no le pasaba.

 

SIBOLDI SE QUITA LA ESPINA

Fue la primera vez que Robert Dante Siboldi gana una partida contra Pumas. De sus cinco enfrentamientos anteriores -entre los banquillos de Santos Laguna y Cruz Azul-, el estratega uruguayo tuvo tres empates y dos derrotas.

 

DOS BAJAS FELINAS

Pumas llegó a las semifinales del Guard1anes 2020 con dos lesionados: el portero Alfredo Talavera y el volante Favio Álvarez. El primero, con esperanzas de reaparecer en la ‘vuelta’, mientras que el argentino prácticamente se despidió del torneo (lesión en la rodilla derecha).

 

ALDRETE, EN DUDA

El lateral izquierdo Adrián Aldrete está en duda para la ‘vuelta’ de las semifinales, contra Pumas. El defensa del Cruz Azul salió lesionado a los 21 minutos, aparentemente con un golpe en el talón. La última vez que se ausentó de un partido fue en la primera fecha del Torneo Clausura 2020.

 

“CABECITA” VS DINENNO

Contra los Pumas, el uruguayo Jonathan Rodríguez acumula ocho encuentros y ha marcado tres goles con la camiseta de los Santos Laguna y uno con la del Cruz Azul. Por su parte, es la segunda vez que Juan Ignacio Dinenno se topa con los celestes, a quienes les propinó un doblete en su juego de fase regular.

 

VA POR DOS DE DOS

Es la segunda vez que Robert Dante Siboldi dirige en Liguilla. Como entrenador de Santos Laguna lo hizo en el Clausura 2018, torneo que conquistó tras eliminar a Tigres, América y al Toluca.

 

VEINTENA DE DUELOS DIRIGIDOS

En su partido 20 como entrenador de los Pumas, Andrés Lillini sólo ha sufrido dos derrotas: una con León, en la fase regular, y la goliza de ayer frente a la Máquina.

 

GOL QUE HACE HISTORIA

La anotación de Roberto Alvarado, acerca de cumplirse los dos primeros minutos del partido, es el más rápido en la historia del Cruz Azul en fases finales. Además, para el “Piojo” significó su primer gol en el Guard1anes 2020.