MONICA RUBALCAVA / EFE
Foto: EFE
Luis Gerardo Méndez está convencido de que el trabajo del actor es igual al de un detective, y ahora que interpretó a su propio Héctor Belascoarán Shayne lo ha constatado al haber unido en su representación las pistas de “la personificación de lo chilango (de Ciudad de México)”, cuenta en entrevista con EFE.
“Eso somos los actores, somos detectives de nuestros propios personajes, te tocan ciertas pistas y tú tienes que ir a resolver quién ‘chingados’ (diablos) es este ‘güey’ (hombre)”, dice Méndez, quien celebra el estreno de la serie “Belascoarán” por Netflix.
Sergio Goyri y Pedro Armendáriz ya habían dado vida en la pantalla a este detective creado por el escritor Paco Ignacio Taibo II en la novela “Días de Combate” (1976).
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Gracias infinitas a todo el equipo que lo hizo posible. pic.twitter.com/7RhFyopykM— Luis Gerardo Méndez (@LuisGerardoM) October 12, 2022
Pero la imagen de estos hombres rectos e inquebrantables que presentaron Pedro y Sergio se anteponen a la cara elocuente y novata del personaje al que Luis Gerardo ahora da vida.
“Son oportunidades únicas (interpretar a un personaje de esta envergadura), lo que le pasa a los Harry Potters y a los Batmans y demás, pero en mi cultura en mi contexto”, dice Luis Gerardo.
ARRIESGARLO TODO
Belascorán es un hombre que tiene una vida tranquila en el entonces Distrito Federal, ahora Ciudad de México, de los años 70.
La pregunta de su esposa sobre el cambio de color de la alfombra de su casa detonará en él un cambio inmediato a sus aspiraciones y planes a futuro, pues tomará conciencia del absurdo de la vida acomodada que lleva.
Después de ese suceso, abandona toda la estabilidad de su existencia para perseguir la justicia en México, país que desde entonces estaba azotado por la impunidad, corrupción, el crimen y la violencia.
Luis Gerardo decidió no construir a su personaje de la mano de Paco Ignacio y confiesa que no vio las versiones de los anteriores actores mexicanos para crear un auténtico Belascoarán Shayne.
“A mí, la imagen del detective duro inquebrantable que nada lo toca ni lo conmueve no me interesaba tanto, me interesaba este ingeniero que un día decide renunciar a su trabajo, terminar su matrimonio y ordenar un curso de detective por correspondencia para jugar a ser detective y luego convertirse en detective”, comenta el actor.
Esto, considera, es resultado de la apuesta de las nuevas narrativas a abordar los temas con todos sus matices y claroscuros.
“Las novelas se escribieron hace muchos años y ahora es otro momento también. Yo siempre vi a Belascoarán como ‘el origen de Belascoarán‘, el personaje que tenemos en el imaginario colectivo, este detective tosco y duro no empieza siendo así, se va a convertir en eso, pero esa sensibilidad o ese personaje que se vulnera era lo que más me interesaba trabajar”, dice Méndez.
UNA CARTA DE AMOR AL D.F.
Luis Gerardo nació en el céntrico estado de Aguascalientes, pero lleva viviendo en la capital mexicana 20 años.
El caos, estrés e inseguridad de esta urbe es algo que cree que puede decepcionar a cualquiera, pero la serie dirigida por Ernesto Contreras, Hiromi Kamata y Gonzalo Amat, logró “reenamorarlo” de la ciudad y plasmar la esencia de este espacio anteriormente conocido como Distrito Federal.
“Belascoarán y la Ciudad de México tienen una relación amor odio“, asegura.
Hoy se estrena Belascoarán, y por eso les traigo un hilo presentándoles a algunos de los chilangos setenteros que aparecen en la serie. pic.twitter.com/ZDSUt20ZOI
— Netflix Latinoamérica (@NetflixLAT) October 12, 2022
“Es una carta de amor al Distrito Federal, para los que somos de aquí y para la gente que nunca ha venido”, añade.
La serie, que también cuenta con las participaciones de Paulina Gaitán, Irene Azuela, Silverio Palacios, entre otros, también retrata las problemáticas que se vivían en los años 70 en cuestiones de seguridad y pondrá en perspectiva las deficiencias actuales por las que atraviesa el país.
“Sigue siendo un poco la realidad hoy, es difícil pensar que todos dejemos nuestros trabajos y nuestros matrimonios para convertirnos en justicieros como Belascoarán, pero sí se puede ser un poquito como él todos los días, en cómo te relacionas con la corrupción y la injusticia, hay un cambio que se puede hacer desde uno”, considera.