En el mes en que Ecuador celebra su independencia, una historia de triunfo y perseverancia resuena desde las tierras canadienses. Fernando Javier Mendoza Nivicela, oriundo de Machala, ha logrado convertirse en una voz autorizada del periodismo latino en Norteamérica, demostrando que el talento ecuatoriano trasciende fronteras y se posiciona en los escenarios más exigentes del mundo.
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Un sueño que cruzó fronteras
Radicado en Toronto desde 2019, Fernando ha sabido transformar los desafíos de la migración en oportunidades de crecimiento profesional. Su historia representa el espíritu de miles de ecuatorianos que buscan nuevos horizontes sin olvidar sus raíces, convirtiendo la distancia en combustible para elevar el nombre de su país natal.
Con más de 14 años de experiencia en comunicación, Mendoza ha creado “Te Lo Cuento” por ONLATINO.ca, un programa que se ha convertido en referencia del periodismo independiente dirigido a la comunidad hispana. Este espacio funciona como un puente cultural entre las audiencias latinas y las historias de artistas, líderes comunitarios y deportistas que representan la riqueza y diversidad de América Latina.
El programa no es simplemente un espacio informativo; es una plataforma que da visibilidad a voces que tradicionalmente han permanecido en las sombras de los grandes medios norteamericanos.
El recorrido profesional de Fernando evidencia su compromiso con la excelencia periodística. Sus acreditaciones de FIFA, CONMEBOL y CONCACAF lo han llevado a cubrir eventos de talla mundial como la Copa América 2024 y las eliminatorias rumbo al Mundial 2026.
Pero su versatilidad trasciende el ámbito deportivo. Fernando ha pisado las alfombras rojas de los Grammy, Latin Grammy y Premios Juventud, eventos donde ha demostrado su capacidad para conectar con figuras del entretenimiento internacional manteniendo siempre su perspectiva latina.
Más que periodismo: inspiración para la comunidad migrante
Más allá de las cámaras y los micrófonos, Fernando ha convertido su labor en un espacio de inspiración para otros migrantes. Su historia personal resuena con miles de latinoamericanos que han enfrentado el desafío de empezar de cero en un país desconocido.
El ecuatoriano eligió transformar la incertidumbre en oportunidad, demostrando que con talento, perseverancia y conexión con las raíces, es posible construir puentes entre culturas y generar impacto positivo en comunidades diversas.
Con más de 20 mil seguidores en redes sociales y una audiencia creciente en su plataforma digital, Fernando ha logrado construir una comunidad sólida que trasciende las barreras geográficas. Cada publicación, cada entrevista y cada cobertura reflejan no solo su profesionalismo, sino también una conexión genuina con las raíces latinas.
Su capacidad para generar contenido relevante y mantener engagement con su audiencia demuestra que el periodismo moderno requiere adaptabilidad y comprensión profunda de las plataformas digitales.
Un embajador cultural
Fernando se ha convertido en un embajador cultural involuntario de Ecuador en tierras canadienses. Cada entrevista, cada cobertura y cada historia que comparte llevan consigo el sello de su origen machaleño y el orgullo de representar a una nación rica en cultura y talento.
La labor de Mendoza trasciende el entretenimiento y la información. Su trabajo se ha convertido en una herramienta de transformación social que visibiliza historias importantes, conecta comunidades y ofrece representación a voces que históricamente han sido marginadas en los medios mainstream.
La historia de Fernando enseña lecciones valiosas sobre adaptación, resiliencia y mantenimiento de la identidad cultural en contextos multiculturales. Su éxito demuestra que es posible mantener conexión con las raíces mientras se abrazan nuevas oportunidades en territorios desconocidos.
Un ejemplo para las nuevas generaciones
En un mes donde Ecuador celebra su independencia, historias como la de Fernando Mendoza Nivicela recuerdan que el orgullo nacional también vive en quienes llevan sus raíces a cada rincón del planeta. Su voz, que resuena en escenarios internacionales, es un ejemplo del impacto que los ecuatorianos pueden generar en el mundo.
Fernando representa a una nueva generación de comunicadores latinos que no se conforman con ser espectadores, sino que toman el micrófono y crean sus propios espacios para contar las historias que importan.
Su trayectoria confirma que el talento y la perseverancia no conocen fronteras, y que Ecuador puede sentirse orgulloso de tener embajadores como él elevando la voz latina desde cualquier parte del mundo.

Foto: Cortesía 


