MARTÍN AVILÉS

Foto: Mexsport

Tan pronto como Ángela y Jaime se conocieron en la Concordia University Irvine, su pasión en común por el basquetbol los flechó. Su tórrido romance encontró tierra fértil entre el rechinido de los zapatos en la duela y ese particular aroma a balones de cuero. Y de ese amor nació Jaime Jáquez Jr., quien es ahora una figura en la NBA con el Miami Heat y la más grande esperanza para impulsar a la Selección Mexicana de Baloncesto a un lugar más decoroso.

Ángela y Jaime acompañaron a su hijo durante el pasado Draft de la NBA, celebrado el pasado 22 de junio en el Barclays Center de Brooklyn, Nueva York, un lugar donde el siempre soñó estar, y no fue sino a través de su hijo que pudo conseguirlo. Las miradas estaban postradas sobre el fenómeno Víctor Wembanyama, joven francés que está llamado a ser la gran figura del baloncesto mundial en los próximos años.

Pero gracias al trabajo duro y la determinación, el mexicoestadounidense de 22 años se ha metido sigilosamente en la conversación para ser elegido como Novato del Año, robando reflectores al espigado de los San Antonio Spurs.

“Para mí (Jaime), va a ser o va a estar seguramente con los números para ser el Rookie del Año. Es un jugador con un talento ofensivo nato y sobre todo, lo mejor que tiene es un coraje y un trabajo enorme para ganar”, dice a OVACIONES Iván Déniz, entrenador español quien durante su breve paso por los 12 Guerreros, convocó por primera vez al californiano a la selección mayor.

En septiembre de 2018, el ahora alero de Miami fue llamado por primera vez al equipo mexicano, para un par de partidos de las Eliminatorias para el Mundial de la FIBA China 2019. Posteriormente, participó en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 en Perú, donde fue dirigido por el de Tenerife, España.

“(Actualmente) no tiene nada que ver con el jugador que llegamos a ver en la Selección en su momento. Era muy joven, tenía 17 años recién cumplidos y ahora mismo puedo ver a un jugador con un talento grandísimo que creo que va a ser la referencia mexicana de muchos años y estoy muy contento por él”, asegura el actual entrenador de Libertadores de Querétaro de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional (LNBP).

Por el momento, el número 11 del Heat promedia 12.2 puntos por juego, 3.6 rebotes, 2.5 asistencias y una efectividad del 52.2% en sus tiros de campo en 27.3 minutos por encuentro. Que haya llegado hasta la posición 18 de la primera ronda del Draft, parece ahora una ganga tras su meteórica irrupción con el Miami, pero sobre todo, su frenético desarrollo se debe a las sólidas bases que le inculcaron sus padres y que fueron pulidas incluso a su paso por el Tri de basquet.

“Hablamos mucho el tema de la posición, era un jugador muy ofensivo pero en la Selección tenía que asumir otro papel que a él le costaba entender. Era un jugador muy directo al aro, con amenaza a la hora de tiro y en eso hicimos mucho hincapié, en que tenía que ser un jugador capaz de lanzar de media y larga distancia y por lo visto lo ha trabajado en los últimos años y se ha visto su mejoría”, explica Déniz, de 50 años de edad.

Al ser un menor de edad cuando Déniz lo llamó a la Selección Mexicana, sostuvo un trato directo con la familia de Jáquez Jr., con quienes aún tiene comunicación directa, al haber sido parte de su formación. “No he podido hablar con él (Jaime). Con la familia he tenido uno que otro acercamiento pero no con él”.

La quinteta azteca terminó en el séptimo lugar en Lima 2019, con dos victorias y dos derrotas. Pero a pesar del fracaso, jugadores como José Estrada, Jonatan Machado, José Zesati y Diego WIllis demostraron un gran nivel, al igual que Jaime, quien en ese entonces, apenas se abría camino con UCLA Bruins.

Jáquez se ha enfocado en abrirse camino en la NBA y no ha representado al Tri posteriormente en algún torneo, situación que ha causado preocupación en el entorno nacional, luego de que tan pronto llegara a la máxima liga de baloncesto mundial, el también mexicoestadounidense Juan Toscano Anderson, no volviera a representar a los 12 Guerreros. De igual manera, la controversia causada por Poalo Banchero, quien jugaba para Italia pero terminó decantándose por Estados Unidos, deja algunas dudas sobre si Jaime seguirá con México.

“Eso no lo sé, hay que preguntárselo a él. Cuando estuvo con nosotros estuvo muy contento, en el proceso en el que estuve con él, pero ya la pregunta no soy yo quien pueda responderla, la verdad”, dice Déniz, quien lamenta que no exista más detectores de talento en Estados Unidos para encontrar a joyas ocultas con doble nacionalidad que puedan representar a la Selección.

“Creo que hay muy poca gente que trabaja en ese sentido, nosotros somos un club que consideramos que damos oportunidad aa jovenes, no que hagan otros clubes no debe preocuparnos y en ese sentido, espero que nuestro trabajo siga impulsando a jugadores mexicanos que lleguen a Selección mejor preparados”, puntualiza.