MANUEL JUAREZ CASTRO
Foto: Cortesía Diablos Rojos

Sabido es la gran cantera de peloteros que tienen, no de ahora sino de siempre, por eso, la noche del miércoles frente a los Conspiradores de Querétaro, los Diablos Rojos del México debutaron a José Verdugo, a sus 16 años de edad y a Máximo Rodríguez, un serpentinero derecho.

Verdugo, un jugador de cuadro con talento de sobra, vino a batear de emergente en la parte baja de la octava entrada y se ponchó.

Nacido en Los Mochis, Sinaloa, a los tres años de edad empezó a jugar en la liga pequeña Linces en Guasave.

A esa edad, como viven las familias mexicanas enamoradas con este deporte, su papá lo llevaba al beisbol, ya que su abuelo y algunos familiares lo jugaban.

Participó en algunos torneos nacionales representando a su liga y a los 13 años es cuando decidió jugar de tiempo completo, beisbol. En 2022, a los 14 años, fue firmado por los Diablos para integrarse a la Academia Alfredo Harp en 2022 y 2023.

Otro sinaloense, Máximo Rodríguez

También el miércoles, el manager Lorenzo Bundy llamó del bullpen a Máximo Rodríguez, de 18 años, para lanzar en la sexta entrada, con una labor de dos tercios.

El lanzador derecho recuerda que a los 3 años lo llevaron a jugar por primera vez y comenzó en la Liga Quintero en Mazatlán. Después de participar en distintos torneos, fue a los 13 años que se dio cuenta de que se quería dedicar a jugar beisbol, y justo a esa edad lo firmaron los Diablos Rojos.

En este momento tiene 17 años y ha participado en las dos ediciones previas de la Liga Invernal donde ha aprendido muchas cosas que le han servido para seguir desarrollándose.

Tras su debut, su objetivo ahora es ser firmado por alguna escuadra de MLB. Además de José Verdugo y Máximo Rodríguez, los Diablos ya “bautizaron” a Oscar Rojas (pitcher) y Fernando Villalobos (catcher).

Los Diablos jugaban anoche su último encuentro de la serie frente a Conspiradores de Querétaro en el estadio Alfredo Harp Helú.