¡Dejan todo para la vuelta!

20, mayo 2021

PACHUCA Y CRUZ AZUL, SIN DAÑOS

Juegan a no perder y le quedan a deber a los aficionados.- Aparentemente el empate favorece a los celestes, pero el gol de visitante puede complicarles la vida

PACHUCA HGO. – Tuzos y Cementeros se respetaron de más y terminaron la semifinal de ‘Ida’ con empate sin goles, dejando la serie abierta para el próximo sábado en el estadio Azteca donde saldrá el primer finalista del torneo Huard1anes 2021 de la Liga MX.

Un empate que les quedó a deber a los aficionados y el público que se dio cita en el estadio Hidalgo, despidió a los futbolistas con algunos silbidos y abucheos, porque el espectáculo se dio a cuentagotas y el resultado no satisfizo a los aficionados de ambos equipos, que esperaban un poco más de este encuentro, el cual estuvo lleno de expectativas y finalmente no se cumplieron.

 

MUCHO RUIDO Y POCAS NUECES

Pachuca puso a De la Rosa y Sánchez en punta, con Pardo, Sosa e Ibarra llegando de atrás; mientras la Máquina dejó como ofensivos a ‘Cabecita’, Alvarado y ‘Pol’ Fernández, esta vez Reynoso volvió a experimentar y dejó en la banca a Orbelín.

Así, ante un estadio prácticamente lleno, mucho más allá del aforo permitido por las autoridades sanitarias, del 30 por ciento (9 mil aficionados), el partido inició con muchas precauciones, ninguno de los dos equipos quiso arriesgar, los escasos avances a las porterías eran muy predecibles, con mucho acompañamiento y, por consiguiente, demasiado elaborados, dando oportunidad a las defensivas de no permitir libertad alguna a los atacantes.

La primera acción de peligro fue de los Tuzos, Roberto de la Rosa probó fortuna a los 12 minutos enviando su disparo a un costado de la portería de Corona, que se lanzó por si acaso.

Las acciones se trabaron en medio campo, jugando en un espacio de 30 metros, con mucho forcejeo para enviar ‘latigazos’ por las bandas que cuando mucho terminaban en tiros de esquina y eran bien resueltos por los porteros y sus defensivas; los balonazos largos no encontraban receptores y se perdían por las bandas o por la línea de meta.

Romario y Pardo, con base en su velocidad buscaban llegar a línea de meta buscando a De la Rosa, pero fueron bien contenidos por la doble línea defensiva de los Cementeros, mientras que enfrente el “Cabecita” y Alvarado carecían de balones a modo que pudieran inquietar a Ustari, quien era espectador más en el partido.


SE IMPONEN LAS DEFENSIVAS

Las defensivas de ambos conjuntos, bien plantadas, hicieron su “chamba”, Murillo y Cabral por Pachuca se sumaban al ataque cuando las condiciones se los permitían, pero sin hacer nada de peligro, mientras que el cuadro bajo celeste no arriesgaba absolutamente nada ni siquiera se paraban en medio campo.

La tribuna, dividida, animaba a sus equipos con ‘oles’ tempraneros, pero al menos en la primera media hora, el duelo no correspondía a las expectativas por las precauciones extremas que ambos equipos manifestaban en la cancha, “mucho ruido y pocas nueces”.

A diez minutos del final del primer tiempo, las acciones no crecían, la tónica de no arriesgar absolutamente nada prevalecía en el terreno de juego, la única emoción que prendió la tribuna fue al 36, cuando Corona se aplicó a fondo a disparo de Roberto De la Rosa, pero sin consecuencias porque la jugada ya estaba anulada por fuera de juego, el partido seguía debiendo fútbol.

Llegó el silbatazo que puso fin a la primera parte con algunos silbidos de reclamo, pero sin abucheos, esperando un segundo tiempo donde hubiera mayor ambición al frente por alguno de los dos equipos.

 

MÁS DE LO MISMO

Apoyados por sus seguidores, superiores en número a los del Pachuca, los Cementeros parecían adelantar líneas al arranque del segundo tiempo, conscientes que el gol de visitantes les serviría de mucho para el partido de vuelta y pusieron a trabajar al portero tuzo Oscar Ustari con disparos de Alvarado y del “Cabecita” Rodríguez, que no pasaron a mayores, pero al menos fueron tres llegadas en cinco minutos por ninguna de la primera parte.

Los Tuzos reaccionaron y a los 56 minutos, Erick Aguirre hizo emplear a fondo a Corona con disparo raso, tras un tiro de esquina de Ismael Sosa, al manos ya había acciones en ambas porterías.

A los 60, Pezzolano sacó a De la Rosa por Mauro Quiroga, quien prácticamente no jugó toda la temporada, pero quizás en un intento desesperado por buscar balones por alto, se la jugó sacando a su goleador.

En la tribuna comenzaron a escucharse silbidos y abucheos exigiendo más acciones, porque en la cancha el partido nuevamente bajó su ritmo debido a que ambos equipos jugaban a no perder.

La más clara de gol para los Tuzos se presentó a los 76, cuando en un tiro de esquina de Sosa, el balón fue ‘peinado’, dejando solo a Quiroga frente al arco y envió su remate por un costado, evidenciando su falta de ritmo por tanta banca.

Pachuca, con la necesidad de goles, adelantó líneas consiguiendo tres tiros de esquina consecutivos que Quiroga remató, pero completamente desviados, mientras que los Cementeros, tendieron el contragolpe que casi les funciona al 86, cuando un desvió del balón de Cabral, obligó a Ustari a realizar un paradón de esos que realizó contra el América para salvar al Pachuca del gol azul.

Cruz Azul jugó más de seguridad en medio campo y retrocediendo el balón hasta su arquero, invitando a los Tuzos a ir al frente y cazarlos en un contragolpe.

Al 93, Santiago ‘Chaquito’ Giménez penetró al área quitándose defensores y tuvo todo para disparar y vencer a Ustari, pero decidió cederla a Orbelín, quien le pegó a puerta, haciendo lucir en grande a Ustari que nuevamente salvó su meta.

Llegó el silbatazo final y los dos equipos fueron despedidos con algunos abucheos porque no gustó el empate sin goles. Así, todo queda en el aire y se decidirá el próximo sábado en el estadio Azteca, donde los Cementeros tendrán la ventaja para avanzar por su posición de privilegio en la tabla de clasificación