El aborto será siempre un tema complicado.

Para los grupos pro vida es absolutamente inaceptable.

Para la iglesia católica no se diga.

Para las feministas es un derecho que deben tener todas las mujeres, pero no sólo a abortar, sino a hacerlo en condiciones que no pongan en riesgo su vida.

Porque, está comprobado, legales o no, los abortos se practican y se han practicado históricamente.

La posición que fijaron ayer ocho de once ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), incluido su presidente, Arturo Zaldívar Lelo de la Rea, no deja lugar a dudas y da, por primera vez, la razón a los millones de mujeres que han luchado porque se reconozca esa capacidad y derecho a decidir cuándo y cómo ser madres.

Se podrá estar de acuerdo o no, pero en pleno siglo 21 penalizar, castigar con cárcel, a las mujeres que aborten no sólo es anacrónico sino injusto y amoral.

-Desde hace 10 años he sostenido que hay un derecho fundamental a la interrupción del embarazo. Criminalizar a la mujer, sobre todo a la más pobre y vulnerable, es profundamente injusto y abiertamente inconstitucional, dijo y tuiteó el ministro presidente de la SCJN, Arturo Zaldívar Lelo de la Rea.

Y siete de sus coequiperos lo secundaron.

-Se criminaliza a las mujeres.

– Representa violencia de género.

No deja opción a las más pobres y más marginadas.

Está previsto que hoy continúe el posicionamiento de los tres ministros que faltan y que, posiblemente, se vote en caliente.

Y aunque quienes se oponen a despenalizar el aborto están en su derecho, los que lo apoyan también.

Sencillo: si lo despenalizan, si le dan libertad a la mujer para decidir, entonces ya será un tema personal que habrá de respetarse.

La Iglesia llamó apenas el domingo a los ministros a analizar a conciencia dos proyectos -Coahuila y Sinaloa- con énfasis en análisis de calidad en materia de derechos humanos sobre éstos, y decidir en favor de todos los seres humanos.

Guerra sucia en Yucatán

En Yucatán continúa el golpeteo político en contra de quienes se oponen al proyecto sucesorio del gobernador panista, Mauricio Vila Dosal.

La muerte del joven José Eduardo Ravelo continúa sin resolverse y se le da uso político.

Se ha pretendido responsabilizar al alcalde reelecto de Mérida, Renán Barrera Concha, desde la fiscalía estatal, pese a que el joven originario de Veracruz identificó a sus agresores y no son policías municipales.

Barrera Concha es el principal candidato a relevar a Vila Dosal.

Al armar la telaraña, queda al descubierto Ulises Carrillo Cabrera, asesor de Vila Dosal y ex funcionario y amigo de la ex gobernadora, Ivonne Ortega Paheco.

Sí, la ex militante del PRI.

Vámonos:  Hoy se conocerá el informe de la caída del Metro en la Línea 12.

Aunque usted no lo crea, se lo cargarán a los ingenieros y hasta a los soldadores de las vigas. ¿Y Marcelo Ebrard Casaubon, el Carnal de Andrés Manuel que era jefe de gobierno del Distrito Federal cuando se construyó lo que llamó Línea Dorada?

El está listo… para continuar en campaña rumbo a 2024.

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