El héroe de Cruz Azul se llama Ángel Baltazar Sepúlveda. En el último minuto y cuando a La Maquina se le escapaba el récord de puntos, marcó el 1-1 ante Tigres para hacer explotar al pueblo cementero que gritó con todo un gol para recordar por siempre y terminar el Apertura 2024 con 42 puntos.
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Porque además de que significó que Cruz Azul consiguió la nueva marca, fue una clara señal de que este equipo cementero tiene mucho corazón y que en la Liguilla se va a morir en la raya en busca de la décima.
Tigres ya se llevaba la victoria, Nico Ibáñez metió un penal a cinco minutos de finalizar el juego regular, luego de una absurda falta de Gonzalo Piovi a Uriel Antuna.
¡Zarpazo desde el manchón!🐅🐅
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👀Ojito, aficionados de los @TigresOficial, que aquí está el gol con el que están logrando el segundo lugar de la tabla. https://t.co/cT4SntHjj8 pic.twitter.com/QkP4EPs2il
Y parecía que los fantasmas se le volvían a manifestar a Cruz Azul en el peor momento del semestre, de cara a una Liguilla en la que entran como el amplio favorito al título.
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Pero ahí fue que apareció el Ángel cementero, el Sepúlveda salvador de este conjunto celeste, porque literal en el último minuto que agregó el árbitro Adonai Escobedo, metió un cabezazo a centro de Nacho Rivero, para lograr un gol memorable y de récord para Cruz Azul.
¿Quién más? Sólo podía ser él.🚂💙
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En la última jugada del encuentro, un Ángel 👼🏻 bajó del cielo y le dio el empate a La Máquina para romper el récord de puntos en torneos cortos de 17 fechas.
SEPÚLVEDA @CruzAzul 0-0 @TigresOficial pic.twitter.com/9RBp4OkDZq
Volvió el futbol al Ciudad de los Deportes, luego de días convulsos por el tema de la suspensión de actividades, y reabrió sus puertas para ver a Cruz Azul cerrar la fase regular con el récord de puntos incluido.
Para conseguirlo, la misión no era sencilla, porque la “súper Máquina” de Martín Anselmi, tenía que sacar un buen resultado ante uno de los rivales que seguro peleará el título en la Liguilla, como es Tigres.
Un equipo regiomontano que vino a la capital del país, más con la intención de no perder y cerrar bien la fase regular, que realmente querer asegurar el subliderato de la tabla con un triunfo. Y más, luego de la paliza del Toluca al América, la cual al final le dio el segundo lugar a los mexiquenses.
Cierto que con el empate, Cruz Azul consiguió el récord de 42 puntos en torneos cortos, pero más allá de establecer una nueva marca, era mucho más importante para el líder, cerrar el torneo con una victoria categórica de cara al receso de dos semanas antes de la Liguilla, lo cual no logró.
Esta no fue la noche del Azul destructor, ese que juega por nota y que pulveriza al rival que tiene por delante; esta vez, se topó con un equipo que, muy bien parado en zona defensiva y orden táctico, hizo que una y otra vez se encontrara con una pared.
Eso deberá trabajar Martín Anselmi con su Cruz Azul, si no quiere que esta Máquina se quede solo como un equipo de marca de puntos y que lo corone con un título.
En el final del juego, el técnico de Tigres, Veljko Paunovic, se le fue encima al silbante al considerar que se pasó en el tiempo agregado y ahí le dio tiempo a Cruz Azul de empatar.