El cielo se tornó un poco más celeste y se reflejó en los cristalinos ojos de la clavadista Alejandra Orozco, conmovida al recibir de manos del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, la bandera que portará con orgullo mientras navega por las aguas del Río Sena en París 2024. La ceremonia de abanderamiento de la delegación mexicana rumbo a los los Juegos Olímpicos tuvo un toque de nostalgia al evocar el trabajo de cada uno de los atletas que a marchas forzadas por la pandemia, lograron sus objetivos.

Además de Orozco, el pentatleta Emiliano Hernández serán los abanderados del equipo mexicano en la próxima justa veraniega, ahí donde años de esfuerzo, dedicación y esmero habrán valido la pena por ese instante de gloria. Durante la ceremonia, fue la joven esperanza mexicana Osmar Olvera quien se encargó de dar un emotivo discurso que conmovió al propio mandatario, quien aplaudió con esmero al clavadista.

“Es más difícil ser orador para mí que ser clavadista”, dijo Osmar al comenzar su discurso para romper el hielo. “Los juegos Olímpicos de París será digno se ser recordados por las próximas generaciones. Gracias presidente por ver por nosotros, gracias Ana Guevara por el respaldo y abogar que mi entrenadora Ma Jin pueda ir conmigo a París. El mundo vive un momento importante en materia de inclusión y Derechos Humanos, en París más de 10 mil 500 atleta acudirán en busca de paz y respeto con la intención de ganar una medalla e inspirando también a nuevas generaciones”.

Así comenzó su ponencia el joven que apenas el pasado 5 de junio cumplió 20 años de edad. El triple medallista de oro en los Juegos Panamericanos 2023 no pudo evitar agradecer a una administración de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) que cuando alzó la voz fue escuchado y ahora podrá contar con su entrenadora china a pesar de que el Comité Olímpico Internacional (COI) emitiera una exhortación para que no acudiera ante los problemas federativos.

“Queremos defender con gallardía nuestra Bandera Nacional, que deje un legado al mundo. Serán unos Juegos abiertos después de ocho años pues Tokio fue a puerta cerrada, pero también estarán nuestras familias y amigos en tribunas. Tendremos presentes los resultados históricos de México 68 con nueve medallas totales, una inspiración para nosotros. Lo maravilloso no es llegar a la meta sino disfrutar en camino. Un atleta no sería nada sin el amor de una madre, sin la enseñanza de un maestro o la complicidad de un amigo, y nada sería posible sin nuestra dedicación y compromiso con México, por todo eso, gracias México, iremos a París a participar dignamente”, afirmó.

Posteriormente se dio paso al abanderamiento, donde la escolta conformada por Alejandra Orozco y Emiliano Hernández, así como Ricardo Peña, Alejandra Valencia y Ricardo Ortiz, avanzó con orgullo para recibir el lábaro patrio de manos del primer mandatario mexicano. El Himno Nacional resonó con fuerza y la piel se erizó al escuchar esas notas que dan identidad al pueblo azteca.

“Les deseamos lo mejor, a su regreso, vamos a llevar a cabo una ceremonia de reconocimiento a todas, a los técnicos, a los entrenadores y a los deportistas olímpicos. Un abrazo de todo mi corazón”, comentó el presidente de México, quien elogió las palabras de Osmar, pues coincidió en que es gracias a la familia mexicana que los atletas logran salir adelante con el apoyo de los suyos.

México está listo para París 2024 con la certeza de contar con deportistas comprometidos y decididos a defender con el alma a su país. Será el próximo 26 de julio cuando esa misma Bandera haga cimbrar a todo un pueblo a unos 9 mil 200 kilómetros de distancia. Y que el mundo sepa que detrás de cada atleta, estará el respaldo de una nación más unida que nunca.