Parece una buena noticia la decisión de posponer la dictaminación de la iniciativa de Claudia Sheinbaum sobre desaparición forzada de personas, que analizaría el Senado esta semana, para escuchar las voces de los colectivos que piden ser tomados en cuenta.
Las agrupaciones de personas buscadoras llevan años rastreando por sus propios medios fosas clandestinas, de las que han aparecido muchas en el país, sin ningún tipo de protección ni apoyo de las autoridades que son quienes en primer lugar deberían atender los casos de desapariciones.
La experiencia adquirida durante años en la búsqueda de sus seres queridos no puede seguir siendo ignorada por el gobierno, menos aún cuando lo encabeza la primera mujer presidenta, que debería hacer suya esta causa. Ya era hora de que los colectivos de búsqueda fueran tomados en cuenta.
En la mañanera del viernes Claudia Sheinbaum pidió frenar la discusión de su propuesta en el Senado, asegurando que se escucharán las voces de los colectivos que han solicitado hacer adecuaciones a la propuesta gubernamental. El diálogo será, en primera instancia, con la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez.
Mientras el gobierno promete escuchar, las realidades que describen las buscadoras revelan la urgencia del problema. El pasado miércoles en el noticiero nocturno de El Financiero Televisión, platiqué con Ceci Flores, fundadora del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, quien propuso que la presidenta Sheinbaum invite a un representante de todos los colectivos del país. “Así como traen camiones llenos de gente para que marchen a su favor, que escuche cada caso”, sugirió Ceci Flores.
La fundadora de Madres Buscadora de Sonora, se quejó de que la visita al Rancho Izaguirre haya sido un tour turístico y reveló que en Teuchitlán se sacrificaba a personas y se las daban de comer a los que estaban entrenando. “No se le puede llamar de otra manera, el Rancho Izaguirre era un campo de exterminio”, me dijo durante la entrevista.
Con pesar, Ceci Flores, una de las madres buscadoras con mayor reconocimiento a nivel nacional, dijo que han encontrado crematorios más grandes y consideró que no se pueden callar cosas así, porque está pasando en todas partes”.
Cabe resaltar que apenas el viernes, el Comité contra de Desaparición Forzada de la ONU activó un mecanismo para intervenir en México ante la presunción de que las desapariciones forzadas en el país son un “fenómeno sistemático o generalizado”. El comité solicitará al Estado Mexicano toda la información pertinente.
El gobierno de Claudia Sheinbaum está ante la oportunidad de atender y resolver de una vez por todas el fenómeno de la desaparición forzada que ha ensombrecido y enlutado a tantas familias en México. No podrá hacerlo sola, necesita el apoyo y el conocimiento de los colectivos. Además, será un acto de justicia.
GOrtegaRuiz