Cuatro audios de una llamada telefónica entre quien presuntamente es el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, y el fiscal especializado de Control Competencial, Juan Ramos López, revelan un posible acuerdo con el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SJCN), Alberto Pérez Dayán, para la elaboración de un proyecto de sentencia que mantenga en prisión a Alejandra Cuevas Morán, hija de su excuñada, Laura Morán Servín, por el supuesto asesinato de su hermano Federico, en 2015.

Gertz Manero presume que ha hablado con el presidente de la SCJN, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien le ha manifestado su respaldo, y llama pendeja y vieja a la detenida, además de que explota contra Pérez Dayán, a quien acusa de voltearse totalmente y de incumplir con lo que se iba a incluir en ese proyecto.

También asegura haber leído el proyecto. La acusación del funcionario es originalmente contra Morán Servín, hoy de 95 años de edad y expareja de Federico Gertz Manero, y su hija, presa.

En la Suprema Corte está previsto que a más tardar el 15 de marzo se vote el tema.

A continuación, extractos de las grabaciones:

-El documento ya lo volví a leer, dice quien parece ser Juan Ramos López.

-Es ridículo. Por ejemplo, no dice que la propia pendeja esta que está en la cárcel en autos dijo que ella hacía lo que dice que no hacía.

Y después de hacer toda esa calificación, muy, muy cabrona, muy cobarde, más cobardemente dice: “Yo me lavo las manos, ¡eh! Yo ya te desprestigié y ahora que te chinguen ellos, porque ya estamos todos de acuerdo”.

Esto no tiene puta madre.

Ahora sí ya lo analicé a fondo, ya lo leí tres veces completo, revira quien parece ser Alejandro Gertz Manero.

–  Ahí va usted a ver todas las anotaciones.

Esto lo tiene que decidir, este ¿cómo se llama?

Olea , dice el fiscal general.

–  Sí y también Germán, añade el fiscal especial.

– Además, déjeme decirle una cosa, si el lunes se hace público, a partir del momento que se hace público yo puedo presentar todas los alegatos que yo quiera.

Y no hay una sola imputación de que yo haya tenido una sola intervención, continúa el titular de la Fiscalía General de la República (FGR).

-Nada, no hay nada doctor, una sola llamada no hay, dice el subordinado.

–  Lo ignora y no le entra, pero en cambio le entra a hacer un análisis en donde dice que hay que ser equilibrado en el análisis de las pruebas y él se dedica a hacer la apología de las conductas de esta vieja.

Eso sí no tiene puta madre, ¡eh!

Y me quiso ver la cara de pendejo.

Y todavía me lo manda para ver si me di cuenta, o no, y a ver qué hago.

Eso se lo hicieron.

Y le valió madres,  acusa en tono de enojo.

Ramos López trata de quedar bien:

-De lo que él dijo que iba a poner.

Qué delito, que la coautoría, que la calidad de garante.

Nada, ni una línea.

-Ni una línea de todo lo dijo que iba a poner, responde Gertz Manero.

-Nada, asiente Ramos López de nuevo.

-Ora mire, ahorita yo creo que decirle todo eso es inútil, el tipo lo va a presentar, lamenta el fiscal general.

-Y sí, muy arrogante, dijo: “Yo lo que quieran, lo espero el viernes”, afirma el especializado en Control Especial.

-Sí, se volteó completo, asegura el titular de la FGR.

-Totalmente, finaliza Ramos López.

En otros fragmentos de la llamada, Gertz Manero se queja de que el proyecto elaborado por Pérez Dayán deja en libertad a Cuevas Morán.

-¿Ya la soltó, no?, dice el fiscal general.

-No, porque le dice al magistrado que subsane las cosas y dicte otra resolución, revira Ramos.

-Está clarísimo, la pone en libertad.

Apenas el 15 de febrero, Zaldívar Lelo de Larrea reconoció que se reunió con Gertz Manero y se negó a revelar los asuntos que abordaron, aunque aseguró que no fueron temas personales.

Lo que sí dijo es que cuando estuviese listo el proyecto y se circulara, era muy probable que tanto la familia de Cuevas como el mismo Gertz, en calidad de víctima, le solicitasen una audiencia y que se les daría.

La llamada se da a conocer a unos días de que la SCJN estudie los amparos en revisión 540/2021 y 541/2021 promovidos por Laura Morán Servín y su hija Alejandra Cuevas Morán, encarcelada desde hace poco más de un año, a quienes el fiscal acusa de homicidio por omisión en los cuidados de su hermano Federico, quien murió en 2015.