Cuando uno está en un noviazgo, las finanzas no son lo primordial, ese lugar lo ocupa el amor, la atracción, el enamoramiento, lo que siente el otro, ir al cine cueste lo que cueste, o a cenar sin importar que el lugar sea caro para apantallar.

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Pero cuando se va más en serio en una relación, la gestión financiera puede ser crucial para mantener una convivencia armoniosa y hasta un ambiente familiar sano.

En ese sentido, Juan Luis Ordaz, director de Educación Financiera de Banamex, asevera que el tema del dinero puede llegar a ser un tabú y posiblemente crear conflictos, por lo que considera que el Día de San Valentín, además de ser una fecha para planear un festejo romántico, puede convertirse en un momento para revisar o reorganizar las finanzas en pareja y mantener la armonía.

Por ello, comparte algunas recomendaciones a tomarse en cuenta, como el tener una comunicación abierta, antes de comenzar una vida en pareja o tratar de mejorarla.

“Es fundamental hablar de dinero (ingresos, gastos, deudas y hábitos financieros de ahorro e inversión). Si algún miembro de la pareja tiene una carga financiera considerable, es importante abordar el tema para que no afecte la economía de la pareja en su conjunto”, señala.

Otro punto a considerar es el presupuesto en conjunto, herramienta que no debe de faltar cuando se formaliza una relación. “Deben considerar la dinámica y los gastos de la vida en pareja”.

Como tercer consejo es la distribución proporcional, toda vez que decidir cuánto aportará cada uno para financiar la vida en pareja “puede llegar a ser todo un reto. Si bien la fórmula 50|50 puede sonar la mejor opción, no siempre es así. Consideren la cantidad de ingresos de cada uno y dividan los gastos de manera proporcional”.

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En cuanto a los excedentes y ahorros, después de cubrir los gastos básicos, lo ideal es tener un monto excedente el cual deberá ser destinado al ahorro y/o a la inversión; aquí es donde pueden surgir algunas diferencias.

“Decidan en pareja si está práctica será individual o compartida. Una vez tomada la decisión investiguen sobre cuál es la mejor opción y el mejor producto para ustedes”, comenta Ordaz.

Otro punto son los sueños que se convierten en metas. “Hablen en pareja sobre sus metas en común. ¿Desean comprar una casa, viajar o simplemente ahorrar para una jubilación tranquila? Establezcan objetivos juntos y trabajen en equipo para alcanzarlos”.

Un concepto muy importante es el fondo de emergencia. Tener un “colchón” financiero dará la tranquilidad de poder enfrentar un imprevisto o contingencia financiera. “Si está práctica se complementa con protecciones adicionales como seguro de vida, médico y de hogar reduciremos al mínimo la posibilidad de afectar nuestras finanzas ante una emergencia. Recuerda que una pareja precavida vale por dos”.

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En un noviazgo o relación estable, la comunicación debe ser primordial, por lo que informa a tu pareja de los seguros y productos financieros de los cuales es beneficiario, si ya hicieron la mayor parte de protegerse a sí mismos, a su pareja, hijos y su patrimonio “asegúrense de tener la documentación en orden en un lugar que ambos ubiquen a la perfección, así podrán actuar de inmediato ante alguna contingencia”.

Y ahora sí, salió el prietito en el arroz, existe la ¿infidelidad financiera? Ésta se puede dar cuando un miembro de la pareja realiza y oculta un gasto no planeado. Si bien hay muchas tentaciones, lo mejor siempre será tomar una decisión en pareja para evitar tener conflictos por dinero.

Por último, ¡aprendan juntos! Nunca está de más aprender sobre algo nuevo y desarrollar nuevas habilidades. Esta práctica se puede potenciar si se realiza en pareja.

“Considera que un nuevo conocimiento puede convertirse en una potencial fuente de ingresos adicionales”, puntualizó el funcionario de Banamex.

Cada pareja es única, lo más importante es encontrar una dinámica que les funcione a ambos. La comunicación, el respeto y la flexibilidad son clave no solo para tener unas finanzas saludables, también para garantizar el éxito en la relación.