Félix Salgado Macedonio es el gobernador legítimo de Guerrero.

Así como Andrés Manuel López Obrador fue presidente legítimo en 2006, luego de que Felipe Calderón Hinojosa se robara la presidencia.

Papi Félix, le llaman.

El senador de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) maneja a su hija, Evelyn Salgado Pineda, quien asumió ayer la gubernatura de Guerrero.

El ex alcalde de Acapulco con los colores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) armó el gabinete y ha trazado ya una estrategia de gobierno.

Evelyn es una especie de prestanombres como gobernadora de Guerrero, tanto de Salgado Macedonio como de Andrés Manuel López Obrador.

Cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF o Trife para la banda) bajó a Félix de la candidatura por acusaciones de abuso sexual y violación, de inmediato se buscó la triquiñuela legaloide y el resultado ahí está.

El veterano político no tuvo empacho y, de inmediato, puso a su hija en su lugar. Lo importante no era el proyecto -si es que había-, sino no dejar escapar la gubernatura de uno de los estados más pobres del país.

Serán seis años de Salgado Macedonio y, se lo aseguro, ya proyecta desde ahora doce, porque se lanzará como candidato de nuevo en 2027.

Por lo pronto, el legislador de Morena anda como niño con juguete nuevo.

Y cuidado, porque, insisto, ya tiene la mira puesta en la próxima elección.

Abrazo de Monreal y Sheinbaum

Ricardo Monreal Avila se dice precandidato presidencial.

Y no pierde tiempo.

Un día sí y otro también asegura que será el candidato, pero no se ve cómo.

Claudia Sheinbaum Pardo es la consentida de Andrés Manuel.

Y lo ha confirmado hasta levantándole la mano.

No pierde oportunidad de asegurar que la CDMX está bien gobernada y que Claudia es una mujer y política honesta, seria.

Así que, como sucedió en 2018, la ingeniera de profesión lleva la delantera.

Entonces, Monreal Avila aseguraba que sería candidato al gobierno de la CDMX por Morena o sin Morena.

¿Y qué pasó?

Andrés Manuel se decantó por Claudia y el resultado, sin importarle, es gris.

La elección del 6 de junio mostró cómo los habitantes de la capital del país ya están hartos de las decisiones absurdas de López Obrador y de su equipo.

La oposición PRI-PAN y PRD gobernará nueve alcaldías, de dieciséis que son y la mayoría aplastante en la Cámara de Diputados local también se perdió.

Aún así, es la favorita del ocupante de Palacio Nacional.

El abrazo de ayer en Guerrero, en la toma de protesta de Evelyn Salgado y de su padre, Félix, así lo demuestra.

Vámonos: El verde dos semanas en CDMX y Edomex huele a amarillo con tonos naranja.

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