La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo atestiguó, este domingo, la firma del memorándum de entendimiento entre las Secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), dando inicio a los trabajos preliminares para la construcción del Tren México-Querétaro.

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Así, este mes inician de manera formal los estudios, en donde se utilizará una tecnología especial denominada Lidar para hacer levantamientos, y en abril próximo arranca la construcción, que se espera dure tres años, con una inversión de 75 mil millones de pesos.

Acompañada del gobernador Mauricio Kuri y, tras sostener un encuentro de trabajo con integrantes del gobierno estatal y del federal, dijo en un evento abierto que se establecieron los proyectos necesarios en materia de agua y de energía para la población y la operación del tren.

Confirmó que será el Agrupamiento de ingenieros ‘Felipe Ángeles’, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el que construirá este proyecto.

La presidenta Sheinbaum reveló que, desde hace dos meses, este agrupamiento inició trabajos de planeación de la obra, que la construirá en colaboración con la SICT, que coordinará el proyecto; la Semarnat deberá revisar y mitigar el impacto ambiental y, el gobierno de Querétaro ayudará a abrir los derechos de vía.

El comandante del Agrupamiento de Ingenieros ‘Felipe Ángeles’, Gustavo Ricardo Vallejo Suárez observó que bajo el convenio marco de colaboración entre la Sedena y la SICT, el Ejército llevará a cabo la obra con el uso de sus recursos humanos, técnicos y materiales, la contratación de mano de obra civil, la renta de maquinaria y equipos, la adquisición de materiales de la región, y la gestión de fletes.

La nueva línea contempla 225 kilómetros de longitud –35 kilómetros menos en comparación con el trazo actual de la vía de carga–; tres estaciones y los trenes alcanzarán velocidades de hasta 160 kilómetros por hora.

El titular de la SICT, Antonio Esteva Medina informó que el tren recorrerá Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo y Querétaro en una hora 40 minutos, una reducción de 40%; los trenes tendrán capacidad para 450 pasajeros, y beneficiará a 30 mil personas.