CIUDAD DE MÉXICO.- Este domingo se celebró la Corrida de las Muejeres en la Plaza México, misma que tuvo una gran expectación. En el ruedo actuaron, la rejoneadora Stefania Uribe, y las matadoras de toros Paola San Román, y Rocío Romero, que confirmó su alternativa. La tercia no tocó pelo debido a las fallas con el acero, destacando sin duda lo hecho por la torera queretano en el quinto, que dio la vuelta al ruedo, ante un buen ejemplar de Campo Hermoso. 

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Con el toro “Equidad”, de Marrón, #3 , con 473 kilos , que contó calidad, se presentó en la Plaza México,  como rejoneadora de novillos, Stefania Uribe, que recibió a lomos de “Bocelli” para colocar  dos rejones de castigo; con “Idílico” dos banderillas muy ajustada y por todo lo alto. Cerró con “Mozart” tras clavar dos cortas, dejó un rejón de muerte que tardó en hacer efecto, pero terminó por hacer doblar al toro.

La española Rocio Romero, confirmó su doctorado con el toro “Parejo” #97, con 468 kilos, de Campo Hermoso, de manos de la matadora mexicana Paola San Román. El toro fue débil de remos y Rocío lo toreó entre el viento, por lo que esta cordobesa mostró su temple en pases de manera intermitente, por ambos pitones. Tras pinchazos y tres cuartos de estocada.

Ante el tercero “Con Alas”, #94, con 482 kilos, realizó un quite por chicuelinas antiguas que arrancó una gran ovación, tras una primera tanda en el tercio, se llevó al toro al centro del ruedo, donde desarrolló su faena, ante el ejemplar que embistió calamocheando. No obstante, Paola le plantó cara  y aguantó los arreones. No acertó con la espada y descabello.

Con el astado “Libertad” #59, con 472 kilos de Marrón, que contó con movilidad y nobleza, Stefanía Uribe lo paró con “Bocelli’ y le colocó rejón de castigo. Luego con “Hebreo” lució con banderillas en paisajes milimétricos que emocionaron a la afición. Con “Mozart” clavó una banderilla corta y dos rejones de muerte, debió entrar en acción el sobresaliente para despacharlo. Se le dió arrastre lento al toro.

Con el quinto, de Campo Hermoso, ” Sin Miedo”, #79, con 483 kilos, Paola San Román, se hizo sentir con un quite por chicuelinas. Inició con pases por alto, al filo del tercio. El toro fue deslucido por lo que la matadora se pegó un arrimón en el que aguantó sin pestañear los  embates del burel. Estuvo muy por encima del toro, al que despachó de pinchazo y media estocada.

El último toro de Campo Hermoso “Morado” 99, con 484 kilos, que saltó al callejón, fue picado en exceso y se quedó parado, por lo que la torera Rocio Romero, poco pudo hacer, retirándose en silencio.