La salida de Checo Pérez de Red Bull Racing no fue sino la crónica de una muerte anunciada. El equipo de Milton Keynes separó caminos con el mexicano unos días antes de Navidad, luego de perder el título de Constructores —en gran medida— debido a la amplia brecha con el tetracampeón Max Verstappen, lo que hizo que el anuncio oficial no fuera tan inesperado.
El director del equipo, Christian Horner y el asesor Helmut Marko ya habían sugerido la necesidad de un cambio en su alineación en las semanas previas a Abu Dhabi. Sin embargo, los comentarios recientes de Marko insinuaron que se trataba más bien de un acuerdo mutuo, algo que Pérez no ha confirmado.
“Él (Pérez) siempre esperó encontrar el camino de regreso a su antigua forma, pero desafortunadamente eso no sucedió. Y luego vio que una resurrección no era posible para él en este ambiente y que lo mejor era una separación”, dijo Marko, dirigente de 81 años a Sky Sports Alemania.
Cuando el tapatío de 34 años se unió a Red Bull en 2021, fue visto como un engranaje integral de su máquina. Max Verstappen, que ganó su cuarto Campeonato Mundial este año, siempre iba a ser el número uno en el orden jerárquico, pero Red Bull quería una sólida opción número dos, que parecía haber encontrado en Pérez, de muchos mejores resultados que su antecesor Alex Albon.
Sin embargo, con el tiempo el desempeño de Pérez Mendoza se deterioró. En la segunda mitad de 2023, el mexicano tuvo dificultades y en 2024 todo se derrumbó. Sergio Michel terminó octavo en la clasificación y, aunque Marko insinuó que intentó volver a su forma de 2021, resultó imposible.
Entonces, Red Bull anunció a Liam Lawson como el sucesor de Pérez para 2025, promoviendo a Isack Hadjar de la F2 para ocupar el lugar del neozelandés en RB, para tomar el lugar del oceánico.
Esto significó que Pérez quedó oficialmente fuera de juego para la próxima campaña, siendo la primera vez que se perdería la opción de participar en F1 desde 2010, el año anterior a su debut en el Gran Circo. Sin embargo, centrarse en los aspectos positivos y pasar tiempo fuera de la F1 podría darle a Pérez introspección y un resurgimiento, ya que un regreso podría estar en juego para 2026.
Cadillac-General Motors presentará el undécimo equipo de Fórmula 1 ese año, y Pérez es considerado un fuerte contendiente para liderar ese proyecto. Pérez trae consigo esa experiencia y podría ayudar al equipo a encontrar su lugar en el deporte en sus primeros años.