Los flujos de remesas alcanzaron un crecimiento histórico en abril pasado al registrar un alza de 39.1 por ciento anual, equivalente a cuatro mil 047.6 millones, por lo que en los primeros cuatro meses de 2021 ya sumaron 14 mil 663.1 millones de dólares.

Dicho monto representa un máximo para un mismo periodo y un incremento de 19.1 por ciento, con respecto al mismo lapso de 2020, con lo que este es el crecimiento anual más alto para un periodo igual desde 2005.

De acuerdo con la información que dio a conocer este martes el Banco de México (Banxico), en el lapso enero-abril de 2021, la remesa promedio fue de 361 dólares, por arriba de los 340 dólares registrados en el mismo periodo del año pasado.

En abril de este año, la suma de las remesas de cuatro mil 047.6 millones de dólares, implicó una disminución de 2.6 por ciento en comparación con el flujo recibido un mes antes que fue de cuatro mil 157.3 millones de dólares, el registro más alto desde enero de 1995, cuando se iniciaron los registros del banco central.

El monto promedio por envío en el cuarto mes del año fue de 375 dólares, mayor a los 330 dólares que se enviaron en el mismo mes del año pasado y a los 371 dólares que se observaron en marzo anterior.

El número de transacciones –principalmente proveniente de Estados Unidos-, aumentó 22.5 por ciento anual, su mayor avance desde enero de 2006 cuando repuntaron 23.3 por ciento anual, por lo que en total se efectuaron 10 millones 793 mil 500 operaciones.

De acuerdo con el banco central, entre enero y abril el promedio de operaciones asciende a 10 millones 156 mil 300 transacciones, mayor a las nueve millones 46 mil 600 que se efectuaron en el mismo lapso de 2020.

En tanto que el área de análisis de Grupo Financiero Banorte señaló que si bien abril tiende a contar con un efecto estacional más retador, varios factores podrían haber impulsado el desempeño de las remesas; en particular, el impulso de las transferencias directas en Estados Unidos de mil 400 dólares que se había rezagado a algunas personas.

Observó que se deber considerar una expansión de las transferencias en la unión americana en las personas elegibles (incluyendo parejas conformadas por un inmigrante ilegal), y la extensión a los beneficios por desempleo también pudo haber actuado como una fuente adicional de ingresos para los migrantes, a esto se suma que en general, las condiciones de empleo en Estados Unidos fueron en su mayoría estables.

Analistas indicaron que gracias a los montos de remesas que han llegado al país es como se ha mostrado una recuperación en el consumo interno, sin llegar a los niveles prepandemia.