MARTÍN AVILÉS
Foto: Efe / Reuters
La noche del 2 de febrero de 2020, los Kansas City Chiefs orquestaron una de las remontadas más inesperadas en la historia del Super Bowl al ir abajo por 10 puntos en el último cuarto. Aquella velada en el Hard Rock Stadium de Miami significó la graduación de Patrick Mahomes como superestrella de la NFL, mientras que los San Francisco 49ers dejaron ir la oportunidad de convertirse en el equipo más ganador de la liga junto a Pittsburgh Steelers y New England Patriots.
En contraste con la irrupción de Mahomes, los Niners miraron con tristeza cómo la ineficiencia de Jimmy Garoppolo les costaba tan caro como dejarse arrebatar del dedo un sexto anillo de campeonato. Pero ahora, cuatro años después, la vida le regala al equipo de Kyle Shanahan una oportunidad revancha para cerrar el círculo con los dirigidos por Andy Reid, ahora con la garantía de tener un quarterback con el talento y mentalidad necesarios para no desentonar con un equipo colmado de talento.
Y es que muchas cosas han cambiado en cuatro años y esta revancha de la que el mundo entero estará pendiente —y no hablamos de la de Donald Trump contra Joe Biden en los próximos comicios—, dejará ver qué tanto han aprendido los 49ers sobre esa segunda derrota de su historia en un Súper Domingo.
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Habrán pasado mil 470 días entre ese Super Bowl LIV y el LVIII. Será la séptima revancha en la historia del Gran Juego, de hecho, los 49ers también se enfrentaron —y vencieron— a los Cincinnati Bengals dos veces, mientras que será la reedición desde que Philadelphia Eagles vencieron a los Patriots hace seis años. Además, será la cuarta vez que los equipos se enfrenten dos veces en un Super Bowl en un lapso de cinco temporadas, lo que habla de su consistencia.
Kyle Shanahan de San Francisco y Andy Reid de Kansas City se convertirán en el cuarto par de entrenadores en jefe en enfrentarse en dos ocasiones en una Final de la NFL. Asimismo, cada equipo tendrá solo ocho jugadores que jugaron en el Super Bowl LIV.
Por parte de los Niners, quienes repetirán su participación serán el tacle sdefensivo Arik Armstead, el rusher y defensivo estelar del equipo Nick Bosa; el ala cerrada George Kittle, el receptor abierto Deebo Samuel; el fullback Kyle Juszczyk, el pateador de despeje Mitch Wishnowsky y los apoyadores Fred Warner y Dre Greenlaw.
Los Chiefs, a su vez, contarán con el mariscal de campo Patrick Mahomes, el legendario ala cerrada Travis Kelce; el tacle defensivo Chris Jones, el receptor abierto Mecole Hardman, el ala cerrada Blake Bell, el pateador Harrison Butker, el guardia Nick Allegretti y el centro largo James Winchester.
En el papel, los Niners son quienes mejoraron la calidad de plantilla en comparación con la última vez que se vieron las caras en el Juego Grande. La llegada de Christian McCaffrey representa un incremento sustancial de poderío a la ofensiva, pues a pesar de que en 2020 tenían a Raheem Mostert, ‘CMC’ es un versátil corredor que bien podría ser nombrado MVP de la temporada y no habría una sola objeción.
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Pero, sobre todo, la ya mencionada transición en la posición más importante del juego, es la que podría marcar la diferencia entre la primera edición de este tazón con la que está por disputarse el 11 de febrero. Y es que ‘Jimmy G’ fue una decepción en el Hard Rock Stadium; sus dos intercepciones fueron altamente costosas, por lo que con Purdy como la gema encontrada en medio del pantano, luego de ser elegido en la última posición del Draft 2022, las cosas pueden cambiar bastante en Las Vegas.
En Kansas, ya no está más en el equipo el receptor estrella Tyreek Hill, pero tampoco lo estuvo hace un año y aún así, Mahomes se las ingenió para ganar su segundo anillo a costa de los Eagles de Jalen Hurts. El quarterback de 28 años mejoró su récord en Playoffs a 14-3 con la victoria del domingo contra Baltimore Ravens.
Y contra los 49ers, podría erigirse como el quinto pasador de todos los tiempos en ganar tres títulos de Super Bowl y el tercer jugador en ganar al menos tres premios MVP del Super Bowl, uniéndose a Tom Brady con cinco y Joe Montana con tres. Mahomes ha contabilizado 44 touchdowns y lanzado siete intercepciones en sus 17 inicios en los Playoffs, por ello, poco importa si lo rodea menos talento que a Purdy y con su mera presencia, los Chiefs serán un serio peligro para volver a sorprender a los Niners, por más que las casas de apuestas digan lo contrario
