Foto: Reuters Max Verstappen ha vuelto. El neerlandés de Red Bull Racing dio una nueva exhibición de dominio absoluto en el Gran Premio de Estados Unidos, al conquistar su séptima victoria en el Circuito de las Américas y aumentar significativamente la presión sobre los pilotos de McLaren, Oscar Piastri y Lando Norris, en la lucha por el campeonato mundial de Fórmula 1, que podría convertirse en el quinto título consecutivo para el tricampeón.
El neerlandés, que ya había ganado la Sprint Race el sábado, completó un fin de semana perfecto al convertir su pole position en un liderato incontestable desde la primera curva, manteniendo el control total de la carrera hasta la bandera a cuadros.
Esta doble victoria marca su tercer triunfo en las últimas cuatro carreras, con lo que ha reducido su desventaja con Piastri a solo 40 puntos, cuando restan cinco Grandes Premios por disputarse.
Lando Norris, por su parte, protagonizó una intensa batalla con Charles Leclerc, que se extendió durante gran parte de la competencia. El británico, con una estrategia diferente de neumáticos, aseguró el segundo lugar con un adelantamiento decisivo en la curva 12 de la vuelta 51, reduciendo la diferencia con su compañero Piastri a 14 puntos en el campeonato.
Leclerc completó el podio tras una sólida actuación con Ferrari, mientras que Lewis Hamilton sigue sin subir al podio desde su llegada a la Scuderia, al finalizar cuarto.
Oscar Piastri, líder del campeonato, tuvo un fin de semana discreto y se conformó con el quinto puesto, perdiendo terreno valioso frente a un Verstappen en modo campeón.
La carrera registró un único abandono: Carlos Sainz, de Williams, se retiró tras un contacto con el Mercedes de Kimi Antonelli en las primeras vueltas.
Completaron los puntos: George Russell (Mercedes) en sexto, Yuki Tsunoda (Red Bull) séptimo, Nico Hülkenberg (Sauber) octavo, Oliver Bearman (Haas) noveno y Fernando Alonso (Aston Martin) décimo.
Con el campeonato entrando en su fase decisiva, Verstappen ha enviado un mensaje contundente a McLaren y al resto del paddock: Red Bull sigue siendo una fuerza imparable cuando todo encaja.
