El 2025 comenzó mal para México. Deuda récord, desplome de inversión extranjera, crisis en Pemex y la CFE. Y por si fuera poco, Donald Trump insiste en que los aranceles del 25% contra México entran en vigor hoy.
La advertencia estuvo sobre la mesa desde su regreso a la Casa Blanca, pero el gobierno mexicano apostó a que la contención migratoria, la entrega de narcos y golpes a los cárteles bastarían para evitar la guerra comercial. Se equivocó.
TRUMP NO PERDONA
Estados Unidos impuso un arancel del 25% a todas las importaciones mexicanas, con excepción del petróleo y el gas, que pagarían un 10%. La Bolsa cayó, el peso se depreció y las cadenas de suministro enfrentan interrupciones.
México intentó evitar el golpe con concesiones: la entrega de 29 narcotraficantes, el despliegue de la Guardia Nacional en la frontera y golpes certeros contra los cárteles. Nada de eso ha calmado a Trump. “No hay margen de negociación para México ni para Canadá”, repitió ayer.
Mientras tanto, el país enfrenta otro problema que amenaza su estabilidad: una deuda histórica.
DEUDA HISTÓRICA
El país arrancó el año con un nivel de endeudamiento sin precedentes: 17.5 billones de pesos, el monto más alto en la historia.
En diciembre de 2018, la deuda era de 10.5 billones. Seis años después, el incremento es de 7 billones de pesos.
El gobierno dice que esto se debe al aumento de las tasas de interés, pero la realidad es que en los últimos dos años se contrató deuda a un ritmo acelerado para financiar megaproyectos y gasto electoral.
Cada peso destinado a pagar deuda es un peso menos para infraestructura, educación y salud. Y con los aranceles encima, el margen de maniobra del gobierno se reduce aún más.
CAÍDA DE INVERSIÓN
México perdió atractivo para los inversionistas. En 2024, la inversión extranjera directa cayó un 39%, el nivel más bajo en tres décadas.
El nearshoring, que prometía atraer fábricas y empleos, no ha sido suficiente para compensar la incertidumbre política y las señales contradictorias del gobierno. En 2024, la economía mexicana creció apenas 1.2%, y el último trimestre cerró con un retroceso del 0.6%, el primer signo de contracción desde 2021.
La debilidad económica es evidente en sectores clave como la manufactura y la construcción, ambos en caída libre.
PEMEX Y CFE: FOCOS ROJOS
Las empresas más grandes del Estado mexicano cerraron 2024 con pérdidas multimillonarias.
Pemex registró una pérdida neta de 620.6 mil millones de pesos, la mayor en años. La petrolera arrastra una deuda de 97.6 mil millones de dólares, con producción a la baja y costos al alza.
La CFE tampoco se salva: perdió 124.4 mil millones de pesos en 2024, tras un año donde la depreciación del peso y la falta de inversión golpearon sus finanzas.
Su crisis es un síntoma de una economía frágil y con poca capacidad de respuesta ante choques externos.
INCERTIDUMBRE
El Banco de México ya redujo su previsión de crecimiento para 2025. Antes, esperaba un avance del 1.2%; ahora, ajustó su estimación a 0.6%, y advirtió que si la crisis comercial se agrava, México podría entrar en recesión.
A estas alturas, todo puede cambiar en cuestión de horas. Trump ha dado señales contradictorias, pero los mercados ya reaccionaron al escenario de aranceles.
México arranca el 2025 en la tormenta. Y si el gobierno sigue apostando a la improvisación, los estragos económicos no harán más que profundizarse.