La NFL y la Asociación de Jugadores activaron el protocolo de conmociones cerebrales con el receptor de los Cincinnati Bengals, Tee Higgins, luego de que el jugador reportara síntomas posteriores al partido del domingo, en el que recibió dos fuertes golpes en la cabeza durante la derrota 39-34 ante los Buffalo Bills.

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De acuerdo con un comunicado conjunto, Higgins fue evaluado dos veces durante el juego y autorizado a regresar, pero tras una revisión médica posterior notificó molestias, por lo que fue ingresado de inmediato al protocolo de conmociones cerebrales.

El primer impacto ocurrió cuando un defensivo lo derribó y la nuca del receptor rebotó contra el campo congelado, obligándolo a llevarse las manos a la cabeza y recibir atención médica. A pesar de ello, fue habilitado para continuar.

Minutos más tarde, en una jugada aérea, Higgins cayó de espaldas y de nuevo golpeó la nuca contra el césped, quedándose sentado algunos segundos antes de reincorporarse.

El reporte médico señala que el jugador de 26 años no presentó síntomas hasta el final del encuentro, motivo por el cual la evaluación posterior fue determinante para activar el protocolo.

“Soy un soldado, un tipo que da prioridad al equipo… mis compañeros me necesitaban”, declaró Higgins tras el duelo, al justificar su decisión de seguir en el campo.

Esta es la segunda ocasión en la temporada que Higgins ingresa al protocolo. La primera ocurrió en la semana 12 ante los Patriots, lo que le impidió jugar el duelo siguiente ante los Ravens.

Ahora, su participación para la semana 15 —precisamente ante Baltimore— está en duda, lo que complica aún más el panorama ofensivo de Cincinnati.