De las últimas 10 primeras selecciones globales del Draft de la NFL, ocho fueron quarterbacks. La posición de mariscal de campo se ha vuelto —por mucho— la más importante en la liga, por lo que apostar por el mejor prospecto posible en la Reunión Anual de Selección de Jugadores se ha vuelto una práctica cada vez más común. Aunque en esta edición 2025, la tendencia podría ser otra.
La NCAA ofrece una de las clases con menor talento en la posición de pasador en años, a tal grado, que la mayoría de los expertos duda que el nombre de un QB pueda ser el primero en ser nombrado por el comisionado Roger Goodell la noche del 24 de abril en el icónico Lambeau Field y Titletown, hogar de los Green Bay Packers.
Si bien el entrenador en jefe de segundo año de los Tennessee Titans, Brian Callahan, y el gerente general de primer año, Mike Borgonzi, se han centrado centrando en el mariscal de campo de Miami Hurricanes, Cam Ward, para utilizar su primera selección global, no parecen tan convencidos. El equipo de la AFC Sur decidió cancelar un entrenamiento privado con el segundo QB prospecto de mayor peso, Shedeur Sanders, por lo que todo se resume a Ward o ninguno otro.
El verdadero dilema de Tennessee parece provenir de la tentación por escoger al ganador del Trofeo Heisman 2024, Travis Hunter. Este superdotado capaz de jugar tanto como receptor como esquinero, es el superatleta más completo del Draft y cualquier decisión tomada que no sea elegirlo, será duramente juzgada en el futuro.
En segundo plano, otro no quarterback que ha sido contemplado entre las primeras selecciones pero con menos probabilidad que Hunter para tomar la primera posición general, es Abdul Carter. Se trata de un prospecto de primera línea. La incorporación de Carter a cualquier equipo sería la correcta siempre y cuando no exista la urgencia por un pasador.
Carter es, ni más ni menos, el Jugador Defensivo del Año de la Big Ten en 2024, luego de que lideró la FBS con 23.5 tacleadas para pérdidas. Abdul parece un jugador que valdría la pena elegir incluso por encima de Cam Ward.
A lo largo de la historia del NFL Draft, un total de 36 quarterbacks han sido elegidos como el primer pick global, siendo, por mucho, la posición que más veces se ha ganado esa condecoración.
Sin embargo, vale recordar que el último mariscal elegido antes que cualquier otro jugador en un Draft que pudo ganar un Super Bowl, fue Matthew Stafford, quien dicho sea de paso, ni siquiera lo ganó con el equipo que lo eligió, Detroit Lions, pues fue traspasado a Los Ángeles Rams donde por fin pudo ponerse el anhelado anillo de campeonato en el dedo. Y antes que él, fue Eli Manning en 2004 el último en conseguirlo.
Eso quiere decir que en los últimos 20 años, de 15 quarterbacks elegidos en la primera selección general del Draft, solo dos han ganado un Super Bowl. Si bien un QB es primordial para el éxito en los emparrillados, en una generación con escaso talento entre sus pasadores, bien podría cambiarse la tendencia y apostar por el mayor talento posible sin importar la posición.
