Mientras los Kansas City Chiefs jugaban el 7 de octubre pasado frente a los New Orleans Saints, las casas de las superestrellas Patrick Mahomes y Travis Kelce fueron robadas con apenas unas horas de diferencia. Los presuntos ladrones se llevaron consigo joyas por un valor estimado de 100 mil dólares de la casa del ala cerrada, mientras que tomaron múltiples artículos como jerseys, medallas, trofeos, premios y bolsos de diseñador de la propiedad del quarterback.

LEE ADEMÁS: NFL: Eli Manning, Terrell Suggs y Adam Vinatieri encabezan lista de semifinalistas para el Salón de la Fama

Poco más de un mes después de investigaciones y pesquisas, la NFL ha emitido una alerta de seguridad a los equipos y al sindicato de jugadores sobre supuestos delincuentes que se enfocan en atracar los hogares de atletas profesionales, incluidos los recientes robos a las estrellas de los vigentes campeones del Super Bowl, así lo reveló un memorando difundido por la página oficial de la liga.

Esta ola de delitos, se cree que está vinculada a una organización delictiva que encontró entre deportistas una oportunidad para operar mientras no están en casa debido a los viajes y concentraciones previas a sus partidos. Se cree que la propiedad de al menos otro jugador actual de la liga ya fue asaltada.

Se trataría de la casa en Minnesota de Linval Joseph, quien actualmente juega para los Dallas Cowboys. El tackle defensivo formaría parte de una lista cada vez más larga de víctimas de robos, siendo los últimos, perpetrados apenas el fin de semana pasado.

TE PUEDE INTERESAR: Checo Pérez confía en un buen resultado en Las Vegas y tunde a sus críticos: “Por algo me renovaron”

Según detalló Fox News, fuentes le confirmaron que la policía considera que los culpables son miembros de una red criminal de origen sudamericano encargada de atacar viviendas de alto perfil.

“Se trata de una operación sofisticada. No es un tipo que va a la casa de empeños local. No me sorprende en absoluto que esta ola de delincuencia que se está extendiendo por todo el país esté diseñada por gente muy sofisticada, en una especie de cártel”, dijo al citado medio Mike Barbieri, un experto en seguridad con más de tres décadas de experiencia en el ámbito policial y de investigación en Global Intelligence Consultants Inc., con sede en St. Louis, Missouri.

Sin embargo, más allá de estos supuestos, no se ha especificado ni el estatus migratorio ni el país exacto de origen de los presuntos pandilleros. De acuerdo con varias personas con conocimiento de los crímenes, los perpetradores no son agresivos y no roban casas mientras los residentes están adentro. En cambio, utilizan registros públicos para encontrar las direcciones de los jugadores y realizan una vigilancia exhaustiva.

Al rastrear los horarios del equipo y las cuentas de redes sociales de los jugadores y sus familias, esperan hasta que las casas estén vacías, a menudo durante los juegos, y obtienen acceso para robar rápidamente artículos, tales como dinero en efectivo, joyas, relojes y bolsos, centrándose principalmente en los dormitorios principales y los armarios.

LEE ADEMÁS: Diablos Rojos del México se prepara para la Gran Final de la LNBP 2024: “Estamos listos”

La alerta emitida por NFL Security confirmó este modus operandi y ofreció una serie de recomendaciones, entre ellas no publicar en tiempo real en las redes sociales, instalar sistemas de seguridad y mantener los objetos de valor fuera de la vista.

Oficiales acudieron a la casa de Mahomes en Belton, Missouri, el 6 de octubre, según un resumen del incidente de la Oficina del Alguacil del Condado de Cass. Dicho informe no identificó al egresado de Texas Tech, pero la dirección que figura en los registros públicos coincide con la suya. Luego, TMZ informó de un robo a unos 16 kilómetros de distancia del crimen perpetrado en la propiedad de Mahomes, en la casa de Kelce ubicada en Leawood, Kansas, al día siguiente.

El alero de los Milwaukee Bucks, Bobby Portis, publicó un video en Instagram el 3 de noviembre en el que denunció que sus “posesiones preciadas” habían sido robadas de su casa durante el juego de su equipo el día anterior.

El Minneapolis Star Tribune también informó en septiembre que unos ladrones irrumpieron en la casa del guardia de los Minnesota Timberwolves, Mike Conley, mientras asistía como aficionado a un partido de los Minnesota Vikings. En una declaración a NBC News, el Departamento de Policía de Medina, Minnesota, dijo que investiga el caso Conley en colaboración con otros departamentos de diferentes estados vinculados con robos de alto perfil. Uno más de esta red que, supuestamente, está entretejida por un mismo grupo delincuencial.