El Palmeiras, pese a caer 0-2 en el Allianz Parque de Sao Paulo, en Brasil, avanzó a la final de la Copa Libertadores tras superar en el global a River Plate (3-2).

El primer tanto del conjunto argentino llegó a los 29 minutos, con un magistral cabezazo de Robert Rojas, mientras que Rafael Santos Borré (44′), tras un centro medido de Nicolás de la Cruz, marcó el 0-2.

En el segundo tiempo, la esperanza de remontar el 0-3 de la ida prevaleció en el River Plate, aunque no estuvo libre de la polémica con un par de oportunidades que invalidó el videoarbitraje.


A los 57’, River ya cantaba el tercero, pero un fuera de lugar de Borreó echó para atrás el festejo. Después, la situación se complicó para los de Marcelo Gallardo, al quedarse con un hombre menos, por la expulsión de Robert Rojas (73′).

De igual modo, la tensión llegó a su máxima con una apretada jugada en la que Matías Suárez cayó dentro del área. El silbante marcó penalti desde un principio, pero tras varios minutos y revisar el VAR, descartó la pena máxima.

Así, con el cuchillo entre los dientes, River buscó el tanto del milagro hasta agotarse el reloj de un partido de locura, pero donde el orgullo salió a flote para despedirse con dignidad, mientras que los de Abel Ferreira respiraron tranquilidad una vez escuchado el silbatazo final.

Al respecto, Enzo Pérez, mediocampista de los Millonarios, expresó que “quedamos eliminados con nuestro juego, dejando todo y hasta el final, queda descansar y pensar en lo que viene. Las cabezas en el plantel  tienen mentalidad ganadora, no nos conformamos con nada, en los últimos añosos hemos sido los mejores de América, no nos alcanzó para estar en esta final, pero nos vamos con la cabeza arriba”.