La dirigencia nacional del PAN advirtió que las imágenes de cientos de zapatos abandonados, de credenciales extraviadas y de restos humanos calcinados en Teuchitlán, Jalisco, no solo estremecen, sino que evidencian la crisis de violencia e impunidad que carcome al país.
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El partido que preside Jorge Romero advirtió que a pesar de la gravedad de los hechos, la respuesta oficial ha sido pasiva y evasiva, y esta indiferencia es inaceptable, por lo que exigió a la Fiscalía General de la República atraer la investigación y dar resultados.
Por ello, demandó acciones urgentes para frenar la barbarie y hacer justicia a las víctimas y exigió al gobierno responder claramente ante este crimen de lesa humanidad, pues minimizó y ocultó la existencia de este sitio.
Cuestionó ¿Por qué no hubo ni la más mínima reacción gubernamental desde septiembre pasado que se descubrió tal sitio? ¿Cuántos más existen en el País? ¿Cuántos jóvenes han sido reclutados a la fuerza y condenados a la muerte sin que nadie haga nada?
Ante la magnitud de esta tragedia, exhortamos a la Fiscalía General de la República para que atraiga de inmediato la investigación del caso, deslinde responsabilidades y garantice justicia. “Se habla de al menos 1,000 víctimas con nombre y apellido, jóvenes cuyas vidas fueron truncadas por la violencia. Eran hijos, hermanos, amigos, seres humanos que merecen justicia”.
El PAN demandó además medidas urgentes, como identificación inmediata de los restos hallados y una investigación independiente que determine el nivel de responsabilidad de las autoridades en la omisión de estos hechos.
Además, atención y protección, en su caso, para las familias de las víctimas, así como un compromiso real con los colectivos de búsqueda, que han hecho el trabajo que el Estado ha dejado de hacer. Y la intervención de organismos internacionales para garantizar justicia y evitar que esta masacre quede impune.
El hallazgo de este campo de la muerte no puede ser visto como un hecho más en el horror cotidiano que vive el país. No podemos normalizar la barbarie.
“El gobierno ha abandonado su deber más fundamental: garantizar la vida y la libertad de los ciudadanos. Pero en el PAN no dejaremos de exigir verdad, justicia y un país donde el miedo no sea la norma. México no puede resignarse a ser un país sin esperanza”, sentenció.
Además, señaló que los testimonios de los sobrevivientes describen un centro de reclutamiento forzado y exterminio operado por el crimen organizado, donde decenas de jóvenes fueron brutalmente sometidos, asesinados y desaparecidos, lo que evidencia una tragedia de magnitudes nunca antes vistas en Mexico, “un horror que nos recuerda los peores episodios de la historia mundial”.