Piden a gobierno proponer un presupuesto responsable

JACOB SÁNCHEZ / EFE Foto: Cuartoscuro El presupuesto para 2023 que el gobierno federal presentará este jueves deberá ser mesurado y responsable en medio de la inflación más alta en dos décadas y un posible estancamiento económico, advirtieron especialistas consultados por Efe. “La Secretaría de Hacienda debe ser extremadamente mesurada en lo referente al Proyecto

Continue Reading →



JACOB SÁNCHEZ / EFE

Foto: Cuartoscuro

El presupuesto para 2023 que el gobierno federal presentará este jueves deberá ser mesurado y responsable en medio de la inflación más alta en dos décadas y un posible estancamiento económico, advirtieron especialistas consultados por Efe.

“La Secretaría de Hacienda debe ser extremadamente mesurada en lo referente al Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2023 y mesurada también en sus pronósticos macro, como el tipo de cambio, el precio de la mezcla mexicana (de petróleo), y el déficit presupuestario”, comentó a Efe Ignacio Martínez, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (LACEN).

El experto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) insistió en que la postura del Gobierno debe ser “extremadamente conservadora” para cuidar el gasto en 2023, pues “no habrá holgura” en los recursos públicos.

Dijo que la Secretaría de Hacienda, la dependencia encargada de presentar el PPEF al Congreso federal para su aprobación, también debe evaluar la inflación y su repercusión en las finanzas públicas, en particular en los apoyos fiscales que el Gobierno ha otorgado para paliar el alza de las gasolinas y otros energéticos.

“Va a ser muy difícil que el Gobierno regrese al subsidio del 100 % de los energéticos y, por lo tanto, esto va a provocar que aumenten los precios al productor y que se refleje, por supuesto, en los precios al consumidor”, añadió Martínez.

El especialista comentó que, muestra de ello, es la estimación del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre el producto interno bruto (PIB), que redujo la perspectiva de crecimiento para México en 2023 de 2,5 % a 2,1 %; aunque mejoró su proyección al cierre de 2022 hasta 2,4 % desde un 2 %.

PANORAMA COMPLICADO

Por otro lado, Héctor Villarreal, vicepresidente para América Latina en el Centro de Estudios de la Economía de la Longevidad (EIDL), dijo a Efe que “se ve complicado” el próximo paquete económico, que contiene los criterios de política económica, la ley de ingresos y el proyecto de presupuesto para 2023.

El también profesor investigador del Tecnológico de Monterrey dijo que al Gobierno mexicano no le alcanzan los recursos públicos para solventar todo el pasivo de pensiones, a las que se añaden los programas sociales del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Expresó que también debe permear una perspectiva de cuidar el déficit, el no endeudamiento y no afectar con recortes a presupuestos en sectores esenciales como seguridad, educación y salud.

“Hay dudas muy interesantes sobre el próximo paquete, por ejemplo, qué va a pasar con el subsidio a los combustibles, cómo lo van a proyectar para el 2023 y cómo le va a hacer (el Gobierno) para cuidar déficit, no endeudarse mucho y al mismo tiempo que no se desplome el gasto en temas que son muy sensibles”, resumió.

Villarreal también aplaudió la promesa de la Secretaría de Hacienda de un paquete en el que prive “la responsabilidad”, pero insistió en que “se ve muy feo, se ve bastante apretado el cinturón”.

PRIORIDADES DEL GOBIERNO

El investigador consideró que el Gobierno federal seguirá con el impulso a sus megaobras, como la Refinería de Dos Bocas o el Tren Maya.

Y descartó que puedan aprovecharse los recursos de obras ya concluidas, como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) de la capital.

“Si bien tenemos un sistema fiscal robusto, en el sentido que no se ve que vaya a entrar a una crisis, al Gobierno no le está alcanzando el dinero, entre las pensiones que tiene que pagar, el servicio de deuda y las prioridades que escogió el presidente”, argumentó.

El presidente López Obrador prometió este martes un presupuesto austero, sin aumento de impuestos ni privilegios fiscales, equilibrado y enfocado en programas sociales prioritarios.

El paquete económico tendrá que recibir el aval del Senado y de la Cámara de Diputados en el caso de cambios a las leyes de Ingresos de la Federación, del Código Fiscal federal, y los criterios de política económica y fiscal.

En tanto, será responsabilidad exclusiva de la Cámara Baja aprobar el presupuesto de egresos de 2023 a más tardar el próximo 15 de noviembre, como marcan los tiempos de las leyes mexicanas.