Alejandro Reza / Ovaciones
Foto: Mireya Novo / Ovaciones
El 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, una fecha que conmemora la lucha histórica de las mujeres por sus derechos y la igualdad de género. Una de las formas de expresar esta lucha es el uso del color morado, que se ha convertido en un símbolo de empoderamiento femenino.
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¿Qué significa este color y por qué se utiliza en esta ocasión?
El color morado tiene su origen en el movimiento sufragista, que surgió en el siglo XIX y principios del XX para reclamar el derecho al voto de las mujeres.
Las sufragistas adoptaron el morado como uno de sus colores distintivos, junto con el blanco y el verde. El morado representaba la justicia y la dignidad, el blanco la pureza y el verde la esperanza.
El color morado también se relaciona con la realeza y la nobleza, lo que implica que todas las mujeres merecen ser tratadas con respeto y reconocimiento, sin importar su condición social o económica.
Además, el morado es el resultado de la mezcla del rojo y el azul, los colores tradicionalmente asociados con lo masculino y lo femenino, lo que simboliza la unión y la armonía entre los géneros.
En la actualidad, el color morado sigue siendo un emblema de la lucha feminista, que busca eliminar la discriminación, la violencia y la opresión que sufren las mujeres en todo el mundo. El morado expresa la fuerza, la valentía y la resistencia de las mujeres que se movilizan por sus derechos y por una sociedad más justa e igualitaria.
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Al usar el color morado durante el Día Internacional de la Mujer, las personas muestran su apoyo y su solidaridad con la causa feminista, y su compromiso con la construcción de un futuro mejor para todas y todos, sin distinción de género. Es una forma de visibilizar y reivindicar la importancia de las mujeres en la historia y en el presente, y de recordar que la lucha por la igualdad de género es una lucha de todos y todas.
