Propone AMLO en ONU impuesto a ricos para eliminar pobreza

10, noviembre 2021

El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó la sesión del Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York, Estados Unidos y, al demandar su renovación por “aletargo” y porque nunca ha hecho nada por los pobres, propuso  un ‘Plan Mundial de Fraternidad y Bienestar’.

Esta propuesta operaría con un fondo integrado con una contribución anual voluntaria de 4 por ciento de las mil personas y empresas más poderosas del planeta y del 0.2 por ciento del PIB de los países del G20.

De cumplirse esta meta de ingresos, el fondo dispondría de un billón  de dólares para beneficiar de manera directa, con ayuda del Banco Mundial, a los habitantes más pobres del mundo.

Como titular del Consejo abrió la sesión y saludo a las naciones participantes, así como a la experta en asuntos indígenas Lourdes Tibán Guala.

En su mensaje el primer mandatario de México, en su calidad de presidente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, indicó que no hablaría de asuntos concretos de seguridad e invasiones militares, sino en los postulados del gran titán de las libertades norteamericano, Franklin Delano Roosevelt, quien defendía el “derecho a una vida libres de temores y miserias”.

El presidente de México, como lo ha manejado en innumerables ocasiones, expuso en el importante espacio de la ONU que el principal obstáculo para el desarrollo de muchas naciones es la corrupción.

Indicó que la corrupción se manifiesta en diferentes formas, principalmente los poderes trasnacionales, la opulencia y la frivolidad, así como el modelo neoliberal, que socializa perdidas, alienta el saqueo de los recursos naturales de los pueblos y las naciones.

Agregó que la corrupción que se debe combatir es aquella que se gesta en los tribunales que favorecen a los que más tienen y dañan a quienes no tienen  que comprar su libertad.

“Es corrupción la impunidad de quienes solapan y esconden fondos ilícitos en paraísos fiscales. Quien no pagan o evaden impuestos”, destacó.

Al enumerar las formas de corrupción, señaló que “…es corrupción la usura de los fondos buitres y sería hipócrita e insensato ignorar que la corrupción es la causa de la desigualdad y de la pobreza. De la  frustración, de la violencia,  de la migración y de los grandes conflictos sociales”.

Planteó que estamos en decadencia porque nunca antes en la historia del mundo se había acumulado tanta riqueza en tan pocas manos a costa del sufrimiento de las personas, de los monopolios y de legalizar lo inmoral y aceptar que lo abominable parezcan negocios aceptables.

Aseguró que en la actualidad la generosidad ha sido desplazada por el egoísmo y con ello “nos deslizamos de la civilización a la barbarie y caminamos como enajenados y damos  la espalda a los dolores de la humanidad.

Por tal, censuró, sino somos capaces de revertir estas conductas, no podemos entrar a otros problemas.

Dijo a los representantes permanentes y no permanentes del Consejo de Seguridad que en México se destierra la corrupción y aporta ese dinero al pueblo, además de que se apoya a los jóvenes, adultos mayores, a la educación, a los productores, porque la paz  es fruto de la justicia, debido a que “ningún país es viable si se incrementa la miseria”.

Resaltó que para ser libres se debe acabar con el desempleo, razón por lo que en México se apoya el trabajo y estudio de los jóvenes. Se evita la desintegración familiar y con ello se le quita el semillero o ejército de reserva al crimen organizado.

En el tema de migración comentó se trabaja para estimular el empleo, para incorporar a la población a la producción y no tengan que salir de manera forzada.

Informó que en forma reciente le expuso al presidente Joe Biden, aplicar de inmediato en tres naciones de centroamérica hacer lo que se realiza en Chipas, México, donde se plantan 200 mil hectáreas de árboles y se beneficia a  80 mil sembradores, a 30 mil jóvenes aprendices que reciben un salario mínimo para capacitarse.

“Si estas dos acciones se materializan en Guatemala, Honduras y El Salvador, podrían permanezcan en su país 330 mil personas que están en riesgo de emigrar”.

Aseguró que estas propuestas deben ser aplicadas por la ONU. Pidió que la organización despierte del letargo y salga de la rutina, que luche contra la corrupción que provoca desigualdad y malestar, que entre a una discusión profunda, que tenga mayor protagonismo y liderazgo.

“Nunca en la historia de esta Organización se ha hecho algo sustancioso en beneficio de los pobres. Nunca es tarde para actuar contra la marginación actuando en las causas y no consecuencias”, expresó.