Ravens, a mantener su hegemonía ante los diezmados Texans en el plato fuerte de la Navidad

La última vez que estos equipos jugaron, Baltimore explotó para 229 yardas terrestres para sellar una contundente victoria por 34-10 en la Ronda Divisional de los Playoffs de la temporada pasada.



Baltimore Ravens. Foto: Reuters

La NFL ha decidido dar el regalo de Navidad más grande posible a sus aficionados. Con el encuentro entre Baltimore Ravens y Houston Texans, la mejor celebración para esta fecha será frente al televisor para presenciar un choque entre dos contendientes al título de la AFC, aunque en situaciones contrastantes.

La última vez que estos equipos jugaron, Baltimore explotó para 229 yardas terrestres para sellar una contundente victoria por 34-10 en la Ronda Divisional de los Playoffs de la temporada pasada. Lamar Jackson abrió el camino ese día con 100 yardas, y si bien el quarterback todavía puede usar sus piernas para cambiar el curso de un partido, este año se ha sido Derrick Henry el hombre fuere en el backfield.

Empatado en la cima de la AFC Norte con los Pittsburgh Steelers en una división que se decidirá hasta la Semana 18, los Ravens pueden ganar la división en temporadas consecutivas por tercera vez en su historia, tras haberlo hecho en 2011-2012 y 2018-2019. Mientras que en caso de claudicar, los acereros podrían alcanzar su primer título divisional desde 2020.

Los Texans aseguraron su segundo título consecutivo de la división AFC Sur y pueden ganar 10 juegos en temporadas consecutivas por tercera vez en su corta existencia, tras haberlo conseguido en 2011-2012 y 2018-2019.

Pero ‘El Rey Henry’ difícilmente permitirá que los Texans tengan el camino libre para conseguirlo. Recién el sábado contra los Steelers, Henry se abrió camino hasta 162 yardas en 24 acarreos, esa actuación marcó el cuarto juego de la temporada de ‘El Tractorcito’ con más de 150 yardas terrestres y el séptimo con 100 o más al tiempo que su contrato de dos años y 16 millones de dólares parezca una de las mejores gangas en la NFL.

Los de H-Town han sido formidables contra la carrera este año, en el puesto 11 en la liga en yardas permitidas, pero prepararse para detener el juego terrestre de los Ravens también ha sido una estrategia arriesgada para los equipos este año. Podría decirse que Lamar ha sido incluso mejor esta temporada que la campaña de MVP del año pasado, pues tan solo el sábado, estableció un récord de franquicia en pases de touchdown en una temporada con 37.

Houston tiene garantizado un partido de Playoffs en casa por segunda temporada consecutiva, pero una victoria sobre los Ravens, haría mucho para recobrar la confianza en un equipo que tiene marca de 3-4 desde Halloween y que acaba de sufrir una lesión devastadora en un contribuyente clave en ofensa como es Tank Dell.

Los Texans tienen una preocupante marca de sólo 1-4 esta temporada contra equipos con récord de más de .500 y la única victoria fue contra los Buffalo Bills a principios de octubre. Esa versión de los Texans comenzó ese juego con su trío completo de receptores, conformado por Nico Collins, Stefon Diggs y Tank Dell, pero sólo queda Collins después de que Dell sufriera una grave lesión en la rodilla el sábado.

Los Texans sólo sumaron tres puntos tras la lesión de Dell. Por ello, el corredor Joe Mixon ha tenido que demostrar ser una amenaza fuera del backfield con 33 recepciones para 291 yardas y un touchdown.

John Harbaugh es un veterano experimentado, con años de experiencia en los Playoffs y una victoria en el Super Bowl en 2012. En contraste, el entrenador en jefe de los Texans, DeMeco Ryans, impresionó en su primer año en 2023 y una vez más ha hecho magia, al transformar al equipo en una unidad competitiva, por lo que más allá de las bajas de Houston, éste promete ser un duelo de poder.