La reforma constitucional sobre los derechos de los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas, que se aprobará este miércoles en la Cámara de Diputados es una reforma integral, ya que aborda todos los ámbitos de la vida de los pueblos; es intercultural porque respeta su idiosincrasia, lenguajes y culturas y es multiétnica porque prácticamente convierte a México en una nación pluricultural, aseguró la diputada Dolores Padierna.
LEE ADEMÁS: Presenta Batres su informe de gobierno ante el Congreso local
Detalló que se elimina la palabra poblaciones al ser un término ambiguo y se plantea la palabra pueblos, los pueblos con su autodeterminación y tienen derecho a organizarse como ellos lo decidan social, económica y políticamente.
Además, los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanos serán sujetos de derecho al eliminar el término entidades de interés público y ahora se propone que los pueblos indígenas y afromexicanos son sujetos de derecho.
Esta reforma permitirá el impulso del desarrollo regional al retomar lo que el presidente López Obrador hizo en 17 pueblos indígenas que son los planes de justicia, dijo Padierna Luna.
Asimismo, puntualizó que con la reforma al artículo 2º de la Constitución se reconocen los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos y uno de esos derechos es que deben de ser consultados ante cualquier reforma legislativa o cualquier política pública que se instrumente.
En ese sentido, el gobierno federal, a través de la Secretaría de Gobernación y del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas hizo la consulta de esta reforma en 57 foros, abarcando 27 estados de la República; se hizo un foro para pueblos afromexicanos; un foro para migrantes y ahí participaron 27 mil personas, de las cuales 14,500 eran autoridades indígenas y se hizo un foro nacional con 650 representantes electos en los foros regionales. De tal forma, que la reforma está plenamente consultada.
“Es muy importante mencionar que con esta reforma se establece la consulta a los pueblos y comunidades indígenas en temas o proyectos de alto impacto, como minería o temas hidroeléctricos, ahora, no solamente ellos van a dar la autorización, sino que, en caso de darla, quienes obtengan una ganancia de ese proyecto, tendrán que compartirla con los pueblos indígenas”, sentenció.
Finalmente, acotó que, con la aprobación de la reforma, los pueblos indígenas tendrán derecho a operar y administrar sus propios medios de comunicación, de radiodifusión, de telecomunicaciones y tendrán acceso a Internet de banda ancha.