Se frena venta de Banamex por demanda de Oceanografía

21, enero 2022

POR ALFREDO MAZA/OEM-Informex
La empresa naviera Oceanografía logró frenar la venta del Banco Nacional de México (Banamex), propiedad de Citigroup, en tanto no se resuelva una demanda que tiene en su contra por un presunto quebranto de 30 mil millones de dólares.
Este freno a la venta de Banamex fue avalado por Mario Salgado Hernández, juez septuagésimo Primero de lo Civil en la Ciudad de México, para evitar que la empresa “eluda el cumplimiento de sus obligaciones o el resultado del juicio que se ha promovido o se intente promover en su contra”.
El documento del fallo, al que El Sol de México tuvo acceso, pide de manera expresa a Citigroup “se abstenga de realizar la venta o transmisión de acciones, activos y demás bienes financieros tangibles o intangibles, hasta en tanto no se resuelva en sentencia definitiva el juicio principal”.
Junto con esta petición, el juez solicitó abstenerse de realizar acuerdos, asambleas o cualquier otro acto corporativo para vender, donar, usufructuar o por cualquier medio afectar la cartera de clientes activos y pasivos del banco, así como sus bienes y servicios que afecten el valor de la institución y su salida de suelo mexicano.
El 11 de enero el banco estadounidense Citi informó su decisión de vender su filial Citibanamex como parte de una estrategia a nivel internacional, que incluye la venta de toda su cartera de clientes de créditos hipotecarios, automotrices, tarjetas de crédito, al igual que sus afores y la cartera de pequeñas y medianas empresas.
Citigroup debe
garantizar pago
Para garantizar el pago de las cantidades demandadas por Oceanografía, el juez pidió a Citigroup realizar el pago de cinco mil 200 millones de dólares, o su equivalente en moneda nacional.
En tanto que a Oceanografía le pidió efectuar un pago por 260 millones de dólares, o su equivalente en moneda nacional, con el fin de “garantizar los posibles daños que pudiera ocasionarse” por este fallo a Citi, medida que deberá cumplir dentro de los próximos cinco días “apercibido que de no hacerlo, se revocarán de plano las presentes medidas”.
El pleito legal entre Banamex y Oceanografía comenzó luego de que el 11 de febrero de 2014, la Secretaría de la Función Pública (SFP) inhabilitó a la compañía para realizar contratos con el Gobierno federal por una presunta serie de irregularidades en diversos contratos celebrados con Petróleos Mexicanos (Pemex).
Una vez conocida la inhabilitación de la empresa, Banamex inició una revisión detallada del financiamiento que otorgó a esa compañía y del programa de cuentas por cobrar durante los años recientes.
Oceanografía había recibió préstamos que supuestamente estaban garantizados con facturas por cobrar a Pemex, aunque luego se demostró que esas operaciones eran simuladas.
El 28 de febrero de 2014, con base en una denuncia presentada por Citibanamex, la entonces Procuraduría General de la República (hoy FGR) inició una investigación por desvío de recursos y fraude por más de 585 millones de dólares en contra de los directivos de Oceanografía.
Ocho meses después, Yáñez Osuna fue aprehendido, aunque luego liberado bajo fianza en abril de 2017. Tres meses después se levantó el aseguramiento de Oceanografía y el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) le devolvió la compañía.
Al momento de que el SAE entregó la empresa a Yáñez Osuna se encontraba en proceso de quiebra, con la flota en grave deterioro y multimillonarios pasivos, así como con miles de empleados en las calles que reclamaban su salario.
La investigación realizada por Citibanamex y Pemex llegó a la conclusión de que sólo 185 millones de dólares, de un monto total de contratos entre ambas partes por 585 millones de dólares, estaban debidamente sustentados.
Pero Oceanografía ha asegurado en múltiples ocasiones que todas estas acciones ocasionaron un cuantioso daño económico a la empresa, por un total de cinco mil 200 millones de dólares, de los cuales 30 mil corresponden únicamente a las acciones provocadas por Banamex.