El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Economía, retirará el registro a mil 62 molinos de acero, de un total de 2 mil 233 que se tienen inscritos, luego de que en sus revisiones encontraron algunas “irregularidades o inconsistencias“, entre ellas, simulación en procesos productivos.

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Durante su participación en la conferencia mañanera de la presidenta Claudia Sheinbaum, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, explicó que esta medida, que consiste en cancelar importaciones de productores que cometan irregularidades, evitará que la empresa importadora utilice “registros apócrifos para importar acero“, y con ello no sólo “se reducirá la evasión arancelaria“, sino que se fortalecerá el comercio, pues las faltas e inconsistencias cometidas por las acereras eran un “abuso a nuestra industria nacional“.

Detalló que la dependencia a su cargo desplegó personal en Malasia y otros cinco países, con el fin de llevar a cabo inspecciones exhaustivas. Gracias a esta acción se determinó el caso de los molinos mencionados que, en el registro presentado por quien importa el acero, presentan “inconsistencias, irregularidades o de plano no existen“, y entonces vamos a hacer un proceso de cancelación y desincorporación.

El funcionario federal explicó que, para importar productos siderúrgicos, las empresas requieren llevar a cabo, ante la Secretaría de Economía, el llamado Registro para Importadores: “Las plantas siderúrgicas reciben el nombre de ‘molinos‘ y es necesario informar sobre sus datos y características, así como dar información del material importado”.

Tras la cancelación del registro, enfatizó Ebrard, el productor tendrá competencia justa en cuanto a importaciones. En ese sentido, acotó, la cancelación de registro responde a motivos estratégicos y regulatorios, “enfocados en fortalecer la competitividad del sector y garantizar el cumplimiento de las normativas internacionales“.

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Esta medida del gobierno mexicano se da en medio de la crisis arancelaria generada por las medidas comerciales del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en donde México no ha podido librar tarifas precisamente en acero, además de aluminio y autopartes (sectores que siguen pendientes de resolución definitiva).

En ese sentido, el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) establece reglas claras acerca del origen y la trazabilidad de los productos, incluyendo, desde luego, a los derivados de la industria acerera de nuestro país. Así, la cancelación de registros irregulares busca prevenir también la triangulación, es decir, que productos no mexicanos, canadienses o estadunidenses, entren al mercado nacional, como los chinos, que se exportan a EU como si fueran mexicanos, con el fin de eludir los aranceles ya establecidos.