La imagen de Tyreek Hill bajado de su McLaren 720S a la fuerza por unos policías dio la vuelta al mundo la mañana del domingo 8 de septiembre. El receptor abierto de los Miami Dolphins fue tratado con brutalidad, pero logró ser liberado para llegar a tiempo al juego ante los Jacksonville Jaguars de la Semana 1 de la temporada 2024 de la NFL, cuando lideró a su equipo a la victoria gracias a sus 130 yardas y una anotación, como si nada hubiera pasado.

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Sin embargo, al día siguiente el Departamento de Policía de Miami-Dade (MDPD) publicó las imágenes de las cámaras corporales de los oficiales, mismas que revelaron más detalles de lo sucedido para aumentar la indignación colectiva en un caso que inevitablemente hizo recordar a lo ocurrido con George Floyd años atrás, cuando surgió el movimiento Black Lives Matter en respuesta a estos abusos policiales que han llegado a provocar catástrofes.

Los videos muestran a un policía mientras se acerca al auto de Hill y le golpea la ventana después de haberle indicado que se detuviera. ‘El Cheetah’ baja la ventanilla y le pide: “Oye, no golpees mi ventana de esa manera”, a lo que el oficial le pregunta al receptor por qué no tiene puesto el cinturón de seguridad. “¡No golpees mi ventana de esa manera!”, le insiste Tyreek, al tiempo que el oficial pregunta por qué tenía la ventanilla subida y le dice que tuvo que tocar para avisarle que estaba allí.

“Dame mi ticket (multa), hermano, para poder irme, voy a llegar tarde. Haz lo que tengas que hacer”, dijo Hill antes de subir la ventanilla, a lo que el agente se molesta y le ordena que mantenga la ventana abajo y golpetea de nuevo, pero Hill no parece responder; después baja un poco la ventanilla y responde: “No me digas lo que tengo que hacer”.

El agente amenaza a Hill con obligarlo a salir del coche si no mantiene la ventanilla abajo. Y de inmediato, le ordena que salga. Otro agente abre la puerta del coche de Hill y empieza a sacarlo del coche. Se escucha a Tyreek gritar: “¡Me voy, me voy!”, y el mismo oficial dice: “Demasiado tarde”. Entonces, dos agentes lo empujan al suelo mientras otro se mantiene de pie a su lado y se oye al jugador de Dolphins decir varias veces: “¿Me van a arrestar?”, y el agente que lo sujeta físicamente dice: “Cuando te decimos que hagas algo, lo haces, ¿entiendes? ¿Entiendes? No lo que quieres, sino lo que te decimos. Estás un poco confundido”.

“Está bien, hermano, llévame a la cárcel. Haz lo que tengas que hacer”, dice un resignado Hill. “Lo haremos”, responde el oficial. Posteriormente, los agentes ponen a Hill de pie y lo hacen sentar en la acera. Mientras un agente lo lleva lentamente a sentarse en el suelo, Hill dice: “Espera, hermano. Acabo de operarme la rodilla”. Mientras habla, otro agente se acerca por detrás de él y le pone un brazo alrededor del pecho. Con evidente dolo, lo comienza a derribar hacia el suelo mientras Hill repite: “¡Acabo de operarme la rodilla!”.

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El oficial que lo retuvo ironizó: “De verdad, qué coincidencia. ¿Te habían operado las orejas cuando te dijimos que bajaras la ventanilla?”, ante la visible impotencia del jugador de 30 años de edad, quien posteriormente, rompió el silencio en una entrevista con la CNN.

“Estaba siguiendo las reglas, no me movía rápido porque, como sabes, me lesioné, me pasaron cosas. Practico un deporte físico, llevo un tiempo haciendo esto, así que estoy lidiando con algunas cosas, así que supongo que los oficiales sintieron que no lo estaba haciendo en el momento adecuado. Lo estaba haciendo, pero todavía estoy un poco en shock por eso”, explicó el oriundo de Pearson, Georgia.

Hill reflexionó además sobre el momento en que las cosas se intensificaron y dijo que comenzó cuando los oficiales le pidieron que bajara la ventanilla. Finalmente, lamentó que pudieran haberse puesto las cosas más complicadas de no haber sido porque se trataba de un jugador profesional de la NFL.

“La realidad es que es la verdad. Si yo no fuera Tyreek Hill, en el peor de los casos, habríamos tenido un artículo diferente. ‘A Tyreek Hill le dispararon frente al Hard Rock Stadium’, ese es el peor de los casos. Es una locura que mi familia y yo hayamos tenido que pasar por esto”, sentenció.